La foto de familia de la candidatura del PSOE a las elecciones municipales, tomada ayer en el parque de Santa Margarita con 22 de sus 27 integrantes, muestra una gran sonrisa colectiva que sucede a los malestares evidenciados por las cinco renuncias desde que el Comité Federal ratificó la lista la semana pasada. La aspirante a la Alcaldía, Inés Rey, dio por cerrado el capítulo de tensiones internas con la propuesta de una mejora en el sistema de configuración de listas y apeló a la "gestión eficaz" del PSOE como respuesta al mandato de Marea Atlántica.

"Hubo tensiones habituales pero el capítulo está cerrado. Tenemos una lista magnífica, un equipo con mucha fuerza", destacó Rey, que negó que las dimisiones de Rosa Barreiro, Pedro Méndez, Cristina Otero, Víctor Caramés y María José Fuentes vayan a pasar factura durante la campaña electoral. "Estamos todos juntos en un proyecto para la victoria. Todos unidos", reiteró.

La candidata avanzó que el programa está "acabando de tejerse" y se apoyará en el " leit motiv de la izquierda útil de la mano de los socialistas". Rey censuró "la falta de gestión" del Gobierno local, al que achacó ausencia de proyectos estratégicos. "La ciudad exige un cambio y queremos que el PSOE vuelva a ser el referente", concluyó.

La candidatura realizará visitas a los barrios en los próximos meses para conocer las demandas de los vecinos. Rey repetirá encuentros con sectores en compañía de sus compañeros, a los que ya ve como "los próximos concejales del nuevo Gobierno".