El desmontaje de la vidriera con simbología franquista del Palacio de María Pita comenzará el martes 23 de abril y durará unos diez días, según informa la empresa encargada de la obra, Maumejean Vidrieras Artísticas. Volver a montarla en uno de los techos del edificio requerirá otros quince días de trabajos, para los que la adjudicataria solicita la participación de un cristalero con formación que ayude a los que se desplacen desde Madrid esos días. Entre una y otra fase serán necesarios unos tres meses en la capital para el cambio de los paneles de la vidriera y la sustitución del emblema utilizado por el régimen franquista hasta 1981.

La tarea afectará a los trece paneles que contienen las distintas partes del águila de San Juan, uno de los símbolos de la monarquía castellana, que será reemplazado por el escudo oficial desde hace casi cuatro décadas. La empresa, que instaló la vidriera original, no había podido iniciar los trabajos previos hasta hace un mes, dado que necesitaba que el técnico encargado de la obra realizase un curso específico con certificación para los trabajos. Maumejean solicita además la presencia de otro operario con un curso de acristalamiento de un mínimo de 20 horas de formación para que ayude en las semanas que durará la retirada de la cristalera y su posterior recolocación.

A dos semanas de que empiece la obra, el vecino de A Coruña Francisco Míguez, familiar de un represaliado por el bando republicano, asesinado en Málaga en 1936, ha presentado por registro un escrito en el que pide al alcalde que cesen las obras previstas en la vidriera. Los abogados que le representan, del despacho Milans del Bosch, se apoyan en que el escudo es un bien artístico de interés cultural para la ciudad que "no supone ninguna exaltación" de las que condena la ley de memoria histórica.