Las deficiencias del concurso de compra de vivienda para alquiler social convocado por el Ayuntamiento, constatadas en el último año por el propio Gobierno local y el Consello Consultivo de Galicia tras las denuncias de la oposición, han provocado decisiones y dictámenes vinculantes que conducen a los juzgados a, por el momento, más de la mitad de los casos del proceso irregular. La oposición de los propietarios de al menos cuatro de los seis pisos adquiridos a la anulación de las operaciones tras sendas revisiones de oficio por el incumplimiento de las bases del concurso, que conllevarían la devolución de los inmuebles y de las cantidades recibidas por su venta, abocan a los implicados „particulares y Concello„ a la vía judicial.

Las irregularidades señaladas hace un año por el grupo municipal del PP en la compra de dos pisos que eran propiedad de un simpatizante de Marea Atlántica fue el detonante de un proceso que acabó siendo objeto de debate en dos plenos extraordinarios, en uno de los cuales la oposición reclamó la dimisión de los ediles Xiao Varela y Alberto Lema. Esas deficiencias también llevaron al Gobierno local, que en un principio negó los errores del concurso, a revisar de oficio la compra de esos dos inmuebles primero y del resto de los adquiridos después. Y tales errores acabaron a continuación en el Consello Consultivo, que ha emitido hasta ahora cuatro informes que avalan que el Concello anule la compra de los pisos.

A esta anulación se ha opuesto ya el dueño de los inmuebles adquiridos en las calles Joaquín Martín Martínez y Santander, un afín a Marea Atlántica que no reside en A Coruña y que el mes pasado, tras un año de silencio, admitió que "en el peor de los casos", si los juzgados fallan en su contra, tendría que recuperar los pisos que vendió y devolver los 145.865 euros que el Concello le abonó por ellos. En la actualidad este particular, que en un escrito criticó al Gobierno local por no defenderlo y a la oposición por utilizar electoralmente su caso, no dispone de ese dinero, ya que, según explicó, con la venta de sus propiedades en la ciudad compró una vivienda en donde reside habitualmente, Cataluña.

El mismo rechazo han manifestado los propietarios de los pisos de las calles Fe y Almirante Mourelle a la resolución favorable del Concello de revisar de oficio ambas adquisiciones, que, como en los otros dos inmuebles, resultaron irregulares por el incumplimiento de las bases del concurso. El Consultivo avaló el mes pasado la anulación de estas operaciones porque en los dos casos los pisos no estaban inscritos a nombre de las personas ofertantes ni en el momento en que se presentaron las solicitudes en el Registro municipal ni cuando se dictó la resolución por la que se aprobó el listado de ofertas admitidas.

La oposición de estos propietarios implicados tras llegar sus casos al Consultivo augura recursos judiciales cuando el Concello tramite la devolución de los pisos a sus dueños y la recuperación del dinero abonado. El número de afectados puede aumentar, ya que en marzo el Gobierno local acordó abrir una nueva revisión de oficio a la adquisición de otro de los pisos del concurso, en la calle Barrera, al haber caducado el proceso de revisión anterior. Solo la otra de las viviendas, en la calle Agra da Bragua, está libre de dudas y parece haber cumplido los requisitos del proceso.

El PP llegó a denunciar las irregularidades, pero la Fiscalía Provincial archivó la querella y decidió investigar el cambio de uso de otro piso similar en 2011, en el mandato de los populares. El fiscal no advirtió "trascendencia penal" en los errores denunciados.