Los ciclistas suelen encontrarse con obstáculos en sus rutas, pero esta vez han sido las chinchetas las que se han cruzado en su camino. Misteriosamente han aparecido en el carril bici de la avenida de A Pasaxe, junto al hospital Materno. Los deportistas que se han encontrado con esta ingrata sorpresa las han recogido y avisado a otros compañeros para evitar pinchazos de ruedas.