El consejo de administración de Emvsa tomó conocimiento ayer del reglamento para la creación de un banco de viviendas de alquiler para colectivos con dificultades y que establece cómo se adjudicarán los pisos que lo compongan. Tras la aportaciones que hagan los ciudadanos al texto, este se aprobará en junta de gobierno y, posteriormente, se votará en el pleno municipal. El alcalde, Xulio Ferreiro, defendió que la colaboración entre el Concello y los propietarios de pisos vacíos propiciará que personas "con dificultades de acceso a la vivienda" puedan tener un hogar "a precios razonables". El coste de cada piso no superará el 20% de los ingresos de las familias o del 15% si solo perciben la Risga o la Renta Social Municipal. El regidor explicó que los dueños tendrán la garantía de la devolución de la vivienda "en buenas condiciones".

El grupo municipal del PP denunció ayer que, con la tramitación restante para acabar el procedimiento de aprobación, el programa "no estará aprobado inicialmente este mandato" y reprochó que el Gobierno local no haya hecho "ninguna" vivienda nueva en el mandato.