Nací y me crié en Elviña hasta que me casé, a los 28 años, con Josefina Balado, con la que tengo dos hijos, Nuria y Ramón, y un nieto llamado Mauro. A mi mujer la conocí en el baile del Sally y de casados nos fuimos a vivir a A Gaiteira. Mi familia la formaban mis padres, Ramón Tasende y Asunción Díaz, ambos fallecidos, y mis cuatro hermanos: José Luis, Mercedes, María del Carmen y Dolores.

Mi madre siempre se ocupó de las labores de la casa y mi padre fue conductor el tranvía Siboney, que hacía en recorrido de A Coruña a Sada; y cuando desapareció éste, la Compañía de Tranvías, lo puso a trabajar en una caseta instalada en la avenida de Finisterre, donde tenía un desconectador automático para cortarla corriente cuando a alguno de los trolebuses de aquella época se le escapaba a alguna de sus pértigas. Entonces mi padre, desde esta caseta, cortaba la corriente de la línea del trolebús para que el conductor o el mismo cobrador pudieran poner con total tranquilidad la pértiga conductora del vehículo.

Mi primer colegio fue el de la Escuela Nacional del Castro de Elviña, en el que estuve hasta que me fui a estudiar a la Escuela del Trabajo del colegio de Elviña. No tengo un buen recuerdo ya que su maestro don Antonio nos ponía a toda la chavalada a caldo; lo mismo ted aba una colleja cuando llegabas al colegio como cuando salías para que te acordaras de él.

De esta época de mi primera infancia solo puedo decir queme divertí todo lo que pude con mi pandilla jugando a todos los juegos de mi época y sacando tiempo también para ayudar a mis padres, ya que era el mayor de sus cinco hijos y me tocaba también cuidar con mis hermanos. La gran ilusión para cualquier chaval de los años cuarenta en adelante era poder ir al cine algunos domingos y disfrutar aquellas viejas películas infantiles de aventuras que proyectaban y que nos hacían soñar con sus aventuras. El cine al que más solía ir era al Cine Monelos, y luego estaba el Doré y el Gaiteira.

Con 14 años entré en la Escuela del Trabajo pero un año antes ya había empezado en una fontanería, donde me hacían trabajar como un burro y donde además no tenía hora de salida. Podían mandarme a cualquier recado a última hora,por lo cual no guardo buen recuerdo. Además, tenía que compaginar con los estudios por nocturno de mecánico electricista.

En estos años de estudio comencé a practicar deporte en el Frente de Juventudes, que es donde había instalaciones. Hacía judo en los bajos que tenían en el Juan Canalejo, teniendo como entrenador a Rabuñal, que siempre se portó muy bien conmigo, ya que ponía todas las facilidades y consejos para practicar este deporte que apenas se conocía. Luego empecé con el ciclismo con Alfonso Couceiro, que fue mi entrenador, y además tuve como compañeros a Ponte, Jesús y Raúl Rey. Se puede decir queen A Coruña éramos los únicos en practicar esta afición. La bicicleta, que costaba una pasta, me la dio Couceiro a cambio de hacerle trabajos en su casa.

Todos empezamos a competir y formé parte de la primera Selección Gallega de Ciclismo,participando en toda cuanta prueba se hacía por Galicia, sobre todo por Vigo, Ourense, Pontevedra y Padrón, donde competía con los hermanos Angueira y Horacio Barros de O Porriño.

Tengo que destacar que fui a correr la subida del Puerto de Pajares y gané por primera vez la misma, ganándole al llamado Cóndor de Ávila, Julio Jiménez, que venía de ganar la montaña en el Tour de Francia. Dijo que yo le había ganado en la subida de Pajares porque venía cansado de la etapa de Francia, pero meses después participé de nuevo en la subida a Montjuic y le volví a ganar en la contrarreloj y también en la general.

Por todo esto me hicieron un contrato profesional pero no llegué a debutar ya queme llamaron para hacer el servicio militar y el Ejército no me dejaba entrenar en la bicicleta. Así que, para poder seguir con el deporte, decidí entrenar en el equipo de atletismo del Cuartel de Infantería en Santiago, donde me hicieron unas pruebas y las gané en todas. Durante el tiempo que estuve en la mili fui campeón de España y de Galicia y subcampeón del Mundo en atletismo militar.

Al acabar la mili, como tenía aprobada una plaza en una institución coruñesa, empecé a trabajar en la misma hasta que me jubilé, además de entrar en la misma época, en los años sesenta, en el equipo del Hércules C.M., de la octava región militar, en el que estuve unos cuantos años. Luego me llamaron para el equipo de atletismo del Deportivo, donde estuve un par de años, tras los que me marché como deportista a la residencia Blume. Después me llamaron del equipo de atletismo del Celta de Vigo, en el que fui junto con otros compañeros campeones de Europa de Clubes.

Fui 14 veces campeón de España, 87 veces internacional, participando en tres campeonatos de Europa en los que conseguí una medalla de plata. Participé en tres Juegos del Mediterráneo, donde también conseguí medallas de plata y bronce. En otros siete campeonatos del mundo de atletismo en los que participé, volvía conseguir una medalla de bronce por equipos. En las Olimpiadas de Mexico del 68 y el Mundial del 72 me sentí orgulloso de participar como gallego y español. No pude conseguir ningún premio por varias lesiones que sufrí en los entrenamientos. Tengo que decir que también participé en el Europa América,siendo el único español en esta competición.

Finalmente decidí dedicarme a ser entrenador de atletismo de velocistas y saltadores de la Federación coruñesa, donde también preparé a campeones de boxeo, de ciclismo y de fútbol sala, deporte del que en la actualidad soy profesor en la escuela de entrenadores. Tengo decir que entrené a equipos como el Chaston Egasa y, como seleccionador de fútbol sala gallego, llegamos a ser campeones durante varios años.

Por último,solo me queda destacar que me concedieron, tras mi carrera,la insignia de oro de las federaciones españolas de atletismo, de la gallega de fútbol sala, del Real Club Deportivo y del Celta de Vigo, además de la medalla al mérito deportivo de la Xunta, de todas las cuales me siento muy orgulloso por además ser uno de los primeros atletas coruñeses que empezó con unos deportes poco conocidos en mi cuidad, donde solamente tenían instalaciones en el Frente de Juventudes. Cuando yo empecé lo único que se hacía era boxeo,lucha americana,baloncesto y poco más. El resto era todo fútbol, con muchos clubes de la época, muchos de los cuales han desaparecido.