Sobre la campana de mandato, el Gobierno municipal llevará a junta hoy la municipalización de la gestión de las bibliotecas municipales, pasado año y medio de trámites y negociaciones desde que encargó iniciar los trabajos técnicos previos y tres años desde que anunció que iniciaba el expediente. El servicio lo llevará la Empresa Municipal de Vivienda (Emvsa), que tendrá que cambiar sus estatutos. El interventor, que ha emitido un reparo de legalidad no suspensivo, advierte de que si no se realiza esta modificación, considerará ilegales los gastos futuros que se generen. El habilitado nacional cuestiona también que la subrogación del personal, hoy ligado a la empresa concesionaria, no afecte a la tasa de reposición de plantilla impuesta por la ley estatal de racionalización del gasto público.

La junta de gobierno acordará hoy la encomienda a Emvsa de la gestión de los servicios bibliotecarios en el Ágora, Fórum, Sagrada Familia, Os Rosales y la Infantil y Juvenil de Durán Loriga, ahora externalizadas, así como el apoyo técnico a la red de bibliotecas municipales. Será una encomienda por cinco años prorrogables. Asimismo, aprobará que la ejecución del encargo quede condicionada a la adaptación del contenido de los estatutos de Emvsa a la Ley de Contratos del Sector Público, como advierte el interventor.

El informe de Intervención considera que Emvsa debe cambiar su reglamento, también para acreditar, como señala la ley, que dispone de medios personales y materiales para cumplir con el encargo. Advierte además de que dentro del objeto social de la empresa pública no existe esta prestación, algo que considera una valoración jurídica negativa pero no causa de un reparo suspensivo.

El acuerdo de la junta de gobierno, señala el Concello en una nota, comenzará a ser ejecutado el día posterior a su publicación en la Plataforma de Contratación del Estado, tras la adaptación de los estatutos en el Consejo de Administración de Emvsa, algo para lo que el Gobierno municipal, sin mayoría, tendrá que contar con el apoyo de grupos de la oposición.

La subrogación del personal y su vinculación al Concello es uno de los temas clave de la municipalización o "internalización" del servicio. La Asesoría Jurídica concluye que el derecho de subrogación de personal de la empresa hasta ahora adjudicataria sigue las mismas normas que tienen que acatar las empresas privadas en caso de estar externalizado el servicio. El personal, con el traspaso a Emvsa, no tendrá consideración de empleado público sino de "personal subrogado a extinguir". Y es que los letrados municipales alertan de que, "en un marco temporal adecuado" que el Ejecutivo municipal no aclara, habrá que convocar unas pruebas selectivas que no estarán reservadas exclusivamente para dicho personal subrogado para "disipar cualquier duda referida a la condición" de la plantilla.

"Lo que intentamos en todo momento es garantizar la estabilidad de las condiciones laborales a la vez que asegurar de que se llevará a cabo un procedimiento selectivo que siga unos criterios de igualdad, mérito y capacidad, y que asegure la cobertura de los puestos de trabajos necesarios para la prestación de un servicio de calidad", alega el edil de Culturas, José Manuel Sande.

Respecto al personal, la Asesoría Jurídica y el Oficial Mayor entienden que la subrogación de personal no computa para la tasa de reposición impuesta durante la crisis y todavía vigente. Sin embargo, el interventor no está de acuerdo. Ni siquiera ve obligatoria la subrogación, que para él sería potestad de la empresa pública, y considera, según la normativa vigente, que sí debe reglarse por las limitaciones de la ley de racionalización. El Oficial Mayor alude a una reciente sentencia de un Contencioso en Cádiz, que avaló la internalización de los socorristas del Ayuntamiento frente a la opinión de la Subdelegación del Gobierno.