La Junta de Gobierno local aprueba hoy encomendarle a la Empresa Municipal de Vivenda, Sevizos e Actividades (Emvsa) la prestación de los servicios bibliotecarios de la red municipal. Este cambio en la gestión permitirá ahorrar al Concello 300.000 euros anuales, ya que, hasta ahora, el servicio lo prestaba una empresa privada, LTM, por 2,41 millones de euros, aunque, durante la ejecución del contrato „adjudicado en diciembre de 2017„ ya advirtió al Concello de que esa cantidad era insuficiente, por lo que, la partida destinada a este fin ascendía en el proyecto de presupuestos municipales para el ejercicio de 2019, ascendía a 2,61 millones de euros.

Finalmente, Emvsa realizará el trabajo por 2,29 millones de euros. El contrato se formalizará por cinco años, aunque podrá ser prorrogado por periodos iguales o inferiores con acuerdo de la Junta de Gobierno local.

Estos 300.000 euros anuales son casi la mitad de lo que, en junio de 2016 „cuando se aprobó iniciar el "expediente de remunicipalización" de las bibliotecas„ estimaba el Concello que ahorraría al no externalizar el servicio. Para entonces, el área de Hacienda preveía un ahorro de 532.090 euros. El concejal de Culturas, José Manuel Sande, explicó ayer, que la gestión de los servicios bibliotecarios a través de Emvsa permitirá la reordenación de las tareas y también asegura que contribuirá a la "mejora de su eficiencia" y en un incremento de las prestaciones que se pondrán a disposición de los usuarios.

El Gobierno local prevé ampliar la red municipal con la apertura de bibliotecas de proximidad en Novo Mesoiro y en Riazor, así como con la creación de una biblioteca central de la ciudad. La internalización de la gestión no afecta a todas las bibliotecas de la red, ya que las de Estudos Locais, O Castrillón y Monte Alto son gestionadas ya directamente por el Concello. Esto implica que Emvsa absorberá al personal que ahora trabaja en el Ágora, en el Fórum Metropolitano, en la Sagrada Familia, en Os Rosales y en la Infantil e Xuvenil. Los trabajadores que estaban prestando el servicio a través de la empresa privada serán subrogados, aunque eso no significa que pasen a ser funcionarios municipales, de hecho, según consta en los requisitos de la encomienda, la plantilla de Emvsa no podrá compartir espacio ni lugar de trabajo con el personal municipal, a menos que resulte imprescindible, de modo que los empleados subrogados no podrán sustituir a los que trabajan directamente para el Concello.

El personal mantendrá con la nueva gestión las tareas que realiza actualmente bajo el mando de LTM Servicios Bibliotecarios, como la atención a los usuarios, tanto a los que acuden a devolver o a pedir prestado material como a los que van a usar los ordenadores; también serán responsables de la programación de actividades de fomento de la lectura. En sus obligaciones están también otras tareas relacionadas con el funcionamiento de toda la red de bibliotecas, como la elaboración de propuestas de selección de fondos. En la nueva organización habrá una persona que dirigirá al personal en cada uno de los centros, que será la representante con el Concello.