La aplicación de las sentencias en contra del cobro de la plusvalía comienzan a notarse en las arcas municipales. Por un lado, el Concello ya ha tramitado decenas de devoluciones de este impuesto, que grava la ganancia de las operaciones inmobiliarias, de propietarios que han demostrado que el precio de sus inmuebles no aumentó desde que los adquirieron hasta su venta. Pero por otro, el área de Facenda ya da la posibilidad, en las nuevas autoliquidaciones, de que el contribuyente quede eximido antes del pago. Según el portal de transparencia municipal, los ingresos por este concepto a 31 de diciembre de 2018 eran de 3,7 millones, un dato provisional que podría crecer pero que queda lejos de los siete millones de previsión en los presupuestos y de los 8,2 millones recaudados en 2017.

Según informó el Concello a principios de año, la hacienda municipal había abierto 140 expedientes de reintegro, 34 ya con conformidad de Intervención Xeral, número que ha crecido desde entonces. En total, el Ayuntamiento ha aceptado devolver al menos 236.662 euros personas que pagaron por este tributo, cuya denominación oficial es el Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana.

Además, asesorías legales especializadas confirman que los que tienen que abonar nuevos impuestos ya tienen la oportunidad de demostrar que no han ganado dinero con la venta y no llegar a pagar en el modelo que está disponible en el portal municipal de abono de impuestos. Si no hay incremento de valor, no hay hecho imponible, cuestión que se suele demostrar a través de la presentación de escrituras.

La plusvalía está en un limbo legal desde que varias sentencias del Tribunal Constitucional cuestionaron la forma del calcularlo, sobre su valor catastral y los años que se ha tenido en posesión la propiedad, por ser ajena a la realidad el mercado inmobiliario y al precio real del bien, lo que hacía que se cobrase siempre independientemente de que hubiese aumentado su valor real o no.

Se puede reclamar hasta cuatro años atrás. Entre 2014 y 2017, el Concello ingresó 16,2 millones por este concepto. Según el acuerdo del PSOE y Podemos para los Presupuestos Generales del Estado, cuyo rechazo motivó la convocatoria de elecciones generales, es el Estado quien asumirá la devolución, tal y como demandaba la Federación de Municipios y Provincias (FEMP).

Al reactivarse el mercado inmobiliario, el Concello recaudó por este concepto en 2017 una cifra ´récord de 8,2 millones de euros, por encima de las previsiones. Según el portal de transparencia municipal, a 31 de diciembre los ingresos por ese concepto habían sido de 3.731.657 euros, un 53% por debajo de lo estimado en los presupuestos.

El número es provisional pero el Gobierno municipal aún no ha presentado la liquidación del presupuesto de 2018, cuestión que ha sido reprochada por la oposición, por ejemplo, por el BNG en el debate sobre el cambio de presupuesto o modificativo que está a punto de ser aprobado de manera definitiva.