La ejecución de unas obras de urbanización pendientes desde hace más de diez años en el complejo de viviendas unifamiliares de O Carón, en A ZapateiraA Zapateira, enfrenta a varios propietarios con el Concello. Al menos dos recursos promovidos por titulares de los inmuebles han llegado a los juzgados de lo Contencioso-administrativo, a los que la administración local ha remitido el expediente sobre el proyecto de urbanización de la zona. Los afectados reclaman al Ayuntamiento en un recurso que ejecute de forma subsidiaria los trabajos que aún no se han hecho, o que, según indica el otro recurso, los lleve a la práctica mediante un acuerdo de cooperación. El Gobierno local señala que no es el responsable de esas obras, sino que lo es la junta de compensación de la que forman parte los propietarios.

Fuentes municipales añaden que el Concello "busca una solución para clarificar y agilizar" la situación en la que se encuentran los vecinos de la urbanización. Para ello, ha requerido a los propietarios que designen a los cargos directivos de la junta de compensación e identifiquen a los titulares con sus correspondientes cuotas de participación con el propósito de adoptar un acuerdo que permita contratar la ejecución de las obras pendientes.

Una vez finalizadas estas, el Ayuntamiento "podrá recepcionar la urbanización del ámbito de forma legal". Hasta entonces, insisten las mismas fuentes aludiendo a los estatutos de la junta, la conservación de la urbanización de O Carón corre a cargo de la agrupación de propietarios.

El Concello notificó a finales del mes pasado el expediente sobre la urbanización de esta zona de A Zapateira próxima al colegio Montegrande al juzgado y a los afectados por los trabajos, aunque no pudo contactar con una decena de propietarios ni con la propia junta de compensación. Ante esta circunstancia emitió un anuncio de notificación para que los interesados se puedan personar en los autos judiciales, que ayer publicó el Boletín Oficial del Estado y que da nueve días de plazo para que se produzca ese personamiento.

El conflicto con el Concello tiene su origen en la urbanización inconclusa de O Carón a consecuencia de la quiebra de la empresa impulsora del conjunto de 46 viviendas a finales de la década pasada. Sin los trabajos finalizados, la administración local no los ha recepcionado, ni en este mandato ni en los dos anteriores, por lo que la zona continúa legalmente en obras.

Los vecinos cuentan con los servicios básicos, pero se han encargado en estos años de pagar el mantenimiento de los jardines y la iluminación pública, sin dejar de reclamar al Concello que solucione los problemas administrativos. Tras amenazar con demandas, lo hicieron a finales de 2018. El Gobierno local apela a un acuerdo que desatasque el conflicto, para lo que reclama la identificación de los responsables de la junta de compensación de propietarios.