El alcalde en funciones, Xulio Ferreiro, rememoró ayer, en el programa Hoy por Hoy, su primera intervención en el programa de la mañana con Pepa Bueno, en la que sus hijos interrumpieron la conexión porque se habían peleado durante el desayuno. Acababa de convertirse en alcalde y, ayer, justo un día después de haber anunciado que dejaba "la primera línea de la política", volvió a intervenir en el matinal. Aseguró, como ya lo había hecho en su despedida, que se iba por coherencia, porque la campaña había estado centrada en él y en su gestión y que no había conseguido revalidar el cargo, pasando de los diez concejales de 2015 a los seis que tiene la Marea ahora. "Cuando uno no consigue los resultados que se fijan,hay que asumir responsabilidades. Esto es lo que decimos todos cuando opinamos desde fuera y entonces hay que hacer lo propio desde dentro", comentó Ferreiro, que asegura que hay muchas razones por las que Marea se ha quedado fuera de la Alcaldía, entre ellas, las dificultades que pusieron las formaciones que facilitaron su investidura a la hora de gobernar; y, también, que el Gobierno local actuó como si "no tuviese que pasar una reválida a los cuatro años". "Trabajamos mucho en lo interno, en proyectos, en sentar las bases para modos de hacer diferentes y, a lo mejor, no conseguimos ofrecer a la ciudad una visión indiscutible de que lo estábamos haciendo", explicó.