Una dotación de los bomberos recuperó sobre las 19.00 horas de ayer el cuerpo de un pescador que apareció flotando en la ensenada del Orzán a la altura de la Coraza. El cadáver corresponde a un hombre de entre 50 y 60 años que vestía botas y equipamiento de pesca y que por su estado llevaba varias horas en el agua, según apreciaron los rescatadores.
Se sospecha que el hombre , cuya identidad se desconocía al cierre de esta edición, pudo caer al mar desde la zona de la Domus, aunque ayer se ignoraba si el fallecimiento se produjo por un golpe contra las rocas o por ahogamiento, lo que tendrá que determinar la autopsia.
El suceso se produjo con la playa repleta de bañistas a causa del intenso calor que vive la ciudad en esta jornada, lo que generó una gran expectación, por lo que los bomberos trasladaron el cuerpo directamente desde el agua hasta la dársena de Oza en lugar de desembarcarlo en el arenal.
