Nunca es tarde para iniciar un negocio. Y si no, que le pregunten a Silvino Fernández. A sus 80 años ha decidido emprender y crear una academia de idiomas online que recibe el nombre de Worldprofe. "Las posibilidades que te da internet son enormes", asegura. Para hacerlo realidad cuenta con el apoyo de la gerente Carolina Ramírez, que fue la encargada de desarrollar esta herramienta.
"El éxito de los negocios es saber hacia dónde va el mercado y llegar allí primero". Ese es el lema de Silvino y, a día de hoy, lo sigue poniendo en práctica. Abrumado por el "enorme cambio tecnológico" que se ha producido en los últimos años, este coruñés nacido en Cuba reparó en la importancia de los idiomas. "El español está de moda en Pekín, así que por qué no ofrecer clases online a cualquier hora y para cualquier persona", propone.
Dicho y hecho. A Coruña será en los próximos días la sede de la nueva academia global de idiomas de Worldprofe. Se puede aprender inglés, francés, alemán, chino, italiano, polaco o gallego. "No hay un límite. Con las nuevas tecnologías podemos dar clases a todos los alumnos del mundo. No hay saturación", expone. Silvino Fernández explica que "cada profesor marca sus horarios disponibles y los alumnos eligen el que mejor les convenga".
Hay docentes en Venezuela „con la que hicieron una videollamada ayer„, México, Honduras, Inglaterra y España, entre muchos otros. "Se ve y se oye perfectamente. Es una maravilla", apunta.
Silvino Fernández fue operador de telefonía y, aunque asegura que "ese mundo de las cabinas murió", siguió dando vueltas a un nuevo negocio hasta dar con Worldprofe. "WhatsApp y Skype han cambiado todo mucho. Las conexiones son rápidas y no cuestan dinero", indica.
En el historial de este coruñés hay un sinfín de experiencias, pero una de las que más le marcó fue la creación, en los años 80, de un estudio de doblaje del que ahora se hace cargo su hijo. "Porque fue el único que heredó mis genes", bromea. Asegura que fueron "los únicos en dar servicio en gallego a la Televisión de Galicia". Formó parte de una compañía telefónica, de una empresa de energías renovables con plantas en Portugal y China e incluso trabajó vendiendo parabólicas. "Da la casualidad de que colocamos la primera antena en el hotel Riazor. De aquella, solo se podía ver el fútbol ahí y la gente alquilaba las habitaciones por 500 pesetas para seguir los partidos", añade.
Reconoce que ahora "las nuevas tecnologías lo son todo" y por eso se ha decidido a lanzar Worldprofe. "Los informáticos dicen que en su mundo no hay paro. Y es cierto. Son muy necesarios. La informática no hay quien la pare", opina.
Con esta nueva plataforma online, a la que ya se puede acceder, cada usuario puede escoger el número de horas que quiere para cada clase e incluso seleccionar al profesor en función del acento, la materia o el nivel de satisfacción. "Abrimos los 365 días del año", concluye Silvino.
