La anulación de la licitación del servicio de mantenimiento de los jardines históricos, aplicada la semana pasada por el anterior Gobierno local, se debió al descubrimiento de errores en los costes salariales incluidos en el pliego de condiciones del concurso, lo que afectaba al presupuesto final, según detalla la resolución del Tribunal Administrativo de Contratación Pública de Galicia. El anterior Ejecutivo municipal preveía adjudicar el contrato en mayo, pero Aseja, la asociación que agrupa a las principales empresas privadas de jardinería presentó un recurso contra el pliego de condiciones que finalmente prosperó y obligó a dar marcha atrás en la licitación.

Mediante este contrato se debía adjudicar el servicio de mantenimiento de los jardines de Méndez Núñez, San Carlos, plaza de España y plaza de As Atochas, Obelisco, Azcárraga, plaza del Libro y cementerio de San Amaro. El presupuesto de salida era de casi 780.000 euros, un 80% más que el del anterior contrato, adjudicado a la empresa Imesapi, del grupo ACS, a la que le fue retirado por el Gobierno local tras imponerle dos sanciones graves por infracciones sobre el control de plagas que y en la prestación del servicio.

Los empresarios del sector manifestaron en su recurso que el presupuesto del contrato estaba mal calculado, en especial con relación a los gastos de personal, que consideraba inferiores a los que fija el convenio de jardinería, a lo que el Concello replicó que se habían elaborado sobre la base de ese acuerdo laboral. Al comprobar el pliego de condiciones y el convenio, el Tribunal Administrativo apreció que la tabla salarial por categorías y años que aparece en el primero "no se ajusta a la establecida en el convenio colectivo".

Para el tribunal, este hecho hace imposible admitir el presupuesto de la licitación, ya que en el informe presentado por el propio Concello se reconoce la existencia de errores de cálculo tanto del personal a subrogar como del de nueva contratación, así como en el salario del gerente del servicio, el coste de la disponibilidad de maquinaria y la reposición de plantas de flor. En su resolución, el tribunal estima que esas "deficiencias en los cálculos" afectan al presupuesto y "dificultan que los licitadores puedan formular sus ofertas en las debidas condiciones", por lo que anula las cláusulas del pliego afectadas por estos errores.