La intermodal entra en un nuevo mandato, el cuarto desde que fue presentada en mayo de 2007, con un importante paso que debería acabar con los retrasos que suma, al menos en lo que concierne a la responsabilidad del Estado en la obra. El Consejo del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha aprobado el expediente de contratación, los pliegos, el gasto y la apertura del procedimiento de adjudicación de las obras de remodelación de la estación de San Cristóbal. La licitación del proyecto tendrá un presupuesto de 48,5 millones de euros y el grueso de los trabajos, que durarán 28 meses, se ejecutará en 2020 y 2021, según anunciaron ayer el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, y la alcaldesa, Inés Rey.

Fomento ya había avanzado en marzo, a través de un anuncio previo obligatorio en el Diario Oficial de la Unión EuropeaDiario Oficial de la Unión Europea, la licitación de las obras en la intermodal, así como la conexión ferroviaria a punta Langosteira. Adif había adelantado el año pasado que seguiría adelante con la adaptación de la estación coruñesa a la llegada de la Alta Velocidad, diseñada por César Portela, a pesar de la falta de acuerdo entre el Concello y la Xunta por el traslado de la estación de autobuses.

Losada detalló ayer algunas actuaciones del proyecto, como la rehabilitación del espacio bajo la marquesina, la remodelación de la planta baja del edificio de viajeros, la creación de una nueva sala de embarque y la construcción de una nueva cubierta sobre las plataformas. También se dispondrán de seis vías de ancho ibérico y tres plataformas de ocho metros de ancho. Una pasarela peatonal comunicará las avenidas de A Sardiñeira y del Ferrocarril, se mejorará la plaza de la estación y se remodelará el aparcamiento en superficie con un nuevo acceso para los vehículos.

Las otras dos administraciones implicadas en la transformación de la movilidad de la ciudad con la estación intermodal deberán también mover ficha tras no haber consensuado sus proyectos durante el mandato anterior. El Gobierno local anterior informó en febrero de que los accesos para que los vehículos lleguen a la infraestructura de transportes por las avenidas de Arteixo, Ferrocarril y A Sardiñeira, estimados en 4,4 millones, tardarían al menos dos años en comenzar, ya que antes habría que tramitar modificaciones en el planeamiento urbanístico para llevar a cabo los proyectos constructivos y los trabajos, además de la licitación de las obras. El nuevo Ejecutivo tendrá que decidir si mantiene este plan o si realiza cambios.

La Xunta, responsable de la integración de la estación de autobuses en San Cristóbal, avanzó el año pasado al licitar la redacción del proyecto que las obras no arrancarían hasta finales de 2022 o principios de 2023. Losada señaló ayer que los plazos en los que muevan las obras de los Gobiernos estatal y autonómico "no son incompatibles".