La Torre de Hércules es patrimonio mundial. No solo por la distinción de la Unesco. También por la variedad de nacionalidades que pasan por el faro. En 2018 accedieron visitantes de 127 países, lo que supone casi dos tercios del mundo. Un dato de récord para el monumento. Europa lidera esta lista, con los franceses como visitantes más habituales por detrás de los españoles. El año pasado, los galos fueron el 3,15% del total (126.076 personas). También eligen A Coruña como destino los alemanes, portugueses, italianos e ingleses. Y el interés por conocer la Torre llega, incluso, a Corea del Sur.

En lo que va de año, el faro ha registrado la entrada de 45.000 personas, un dato que augura que se podrá superar las cifras de 2018. "Esto es importante pero también hay que tener en cuenta que la Unesco nos obliga a que la presión sobre el bien sea más floja, es decir, que se limite el número de personas que acceden a él", cuenta el director del faro, Alejandro de Arce. Desde hace dos años, a la Torre pueden entrar 32 personas a la vez, que se suelen dividir en dos grupos que hacen su visita cada quince minutos. El recorrido suele durar media hora. En verano, con el mayor horario de apertura, esta restricción limita a 714 el número máximo de visitantes diarios.

Lo que le gustaría al responsable de la Torre es facilitar el acceso a los visitantes mediante la venta online. "Es algo que ya se ha hablado. Sería bueno que, en una página web, el visitante pueda ver qué horas hay libres, los precios de las entradas y las bonificaciones", comenta Arce, y pone de ejemplo la Torre Eiffel: "Desde tu casa, en España, puedes encontrar tu entrada y elegir a qué hora vas a hacer la visita". Una medida que evitaría a los turistas tener que hacer cola en el centro de interpretación situado en el parque o quedarse sin entrada a las puerta del faro por la alta demanda. Esta iniciativa también podría incluir, según el director de la Torre, " packs con otros museos". "Que se unifiquen todos los museos y que haya abonos según el que se quiera visitar", propone.

El monumento, que estos días atrae a decenas de visitantes por la celebración del décimo aniversario como patrimonio de la humanidad, espera seguir batiendo récords y llegando a más rincones del planeta. "Se augura un buen año porque los datos en Semana Santa ya han sido buenos y el festejo por los diez años ha coincidido en junio, con San Juan y buen tiempo. Desde Fitur se ha trabajado mucho en atraer más turistas", resumen desde el faro. Según las estadísticas, agosto suele ser el mes favorito para los visitantes. En 2018 accedieron a ella 23.138 personas. El objetivo es superarlo.