En Mérida, los agentes arrestaron a un informático de 42 años al que se le encontraron más de 2.000 archivos relacionados con material sexual de niñas preadolescentes. En Toledo se realizaron dos detenciones; la de un parado de 31 años y la de un comercial, de la misma edad, que intercambiaba material pedófilo de niñas muy jóvenes a través de distintas aplicaciones de mensajería. En Segovia localizaron a un encargado de almacén de 52 años que, para evitar dejar rastro de las páginas pedófilas que visitaba, las apuntaba en una hoja que mantenía oculta en su domicilio. Los dos individuos detenidos en Zaragoza y Madrid eran militares, sin embargo, los investigadores no tienen constancia de que se conocieran entre sí. El último, residente en Paracuellos del Jarama (Madrid), "tomaba extraordinarias medidas de seguridad, lo que hizo muy complicada su vigilancia", según destaca la Policía. En Sevilla, fue un matrimonio el que fue investigado por la tenencia de material pedófilo. En este caso, según explica el 091, fue necesario interrumpir el registro en el domicilio por desmayarse en dos ocasiones uno de los cónyuges.