El segundo pleno municipal tras la primera sesión para aprobar la organización del Ayuntamiento y el aumento del sueldo de los concejales evidenció el consenso, con matices, entre los grupos de la Corporación salvo el PP. El asunto principal que se sometió a debate y votación fue una modificación en el presupuesto de este año que incluye el pago de facturas irregulares, de tres millones a la Compañía de Tranvías por la parte del bonobús que corresponde al Concello y la reserva de una partida de casi un millón de euros para abonar el sobrecoste de la reforma del estadio de Riazor. El cambio en las cuentas fue aprobado con el voto a favor de Marea, BNG y Ciudadanos y la abstención del PP, aunque el pago, en concreto de 943.000 euros, no se ejecutará hasta que concluya la investigación abierta por el Gobierno local sobre el aumento en un 12% del coste de la obra.

Marea Atlántica y PP presentaron sendas enmiendas a la modificación presupuestaria. La del grupo del anterior Ejecutivo defendía la aprobación de la reserva del gasto de casi un millón por la reforma del estadio pero sin abonarse la factura hasta finalizar la investigación y "solicitar todos los informes necesarios", y fue respaldada; la enmienda de los populares, que se abstuvieron en esta votación, apostaba por retirar esa partida del cambio en las cuentas y obtuvo el rechazo de los demás grupos.

El pleno aprobó también, de nuevo con la abstención del PP, un plan económico-financiero como respuesta a la obligación del Ayuntamiento por vulnerar en el ejercicio pasado la regla del tope de gasto de manera coyuntural por una cuestión contable. Por ello, no comporta medias de ajuste ni ningún control por parte de un órgano externo. La medida incluye la previsión de incrementar el techo de gasto en 2019 de 1,7 millones.

Transparencia, diálogo, garantías y responsabilidad fueron algunos de los términos más usados por los concejales que intervinieron en el pleno, que consumieron más tiempo a evaluar el sobrecoste de la reforma de las cubiertas del estadio. Con bastante unanimidad se expuso la conveniencia de posponer el pago de casi un millón de euros hasta que no se "depurasen responsabilidades", hasta que se supiese qué culpa tenían en el caso el Concello y la adjudicataria de las obras.

"Toca investigar. El pago de esa factura se hará siempre con las máximas garantías y cuando cuente con el aval de todos los servicios técnicos municipales", aseguró el portavoz del Gobierno local, José Manuel Lage Tuñas.

Francisco Jorquera, portavoz del BNG, recordó que el presupuesto base de licitación de la reforma fue de 8,2 millones de euros, cantidad que coincide con el coste final, para el que se ha propuesto un suplemento de crédito, aunque la obra se adjudicó por 7,2 millones. Por ello reclamó "una investigación exhaustiva antes de efectuar el pago".

La necesidad de indagar en los detalles de la ejecución de las obras y de "aumentar la seguridad jurídica" fue expuesta como argumento por el concejal de Marea Iago Martínez y la edil de Ciudadanos, Mónica Martínez.

"Más que retirar el asunto, como propone el PP, vemos más constructivo agotar todas las vías de estudio al alcance del Gobierno local, tanto internas como externas", defendió el concejal de Marea, que aprovechó para reclamar "más diálogo práctico" al Ejecutivo socialista y para apremiar en la constitución de las comisiones informativas. "De momento ha avanzado más con Feijóo que con el pacto a la coruñesa con Marea", le reprochó a la alcaldesa.

"Las grandes obras no se hacen deprisa sin tiempo y con carencias del proyecto de ejecución, como indica el supervisor municipal de la obra. Los informes técnicos incluyen un correo electrónico de Xiao Varela en el que recalca la máxima prioridad y da solo dos meses para redactar el anteproyecto. Así pues, creemos que Marea debería reconocer sus errores y asumir su parte de responsabilidad", expuso la concejal de C's.

El PP centró su intervención, a cargo de Antonio Deus, en censurar el proceso seguido por el Gobierno anterior en la reforma del estadio, tras anular la adjudicación a otra empresa en el mandato de los populares. "Es una nueva chapuza que han hecho para hacerse una foto de más de ocho millones de euros", dijo.

Tranvías

El pago de tres millones a la Compañía de Tranvías por el bonobús que incluye el suplemento de crédito aprobado fue usado por el portavoz nacionalista, Francisco Jorquera, para reclamar una evaluación del modelo de prestación del servicio del transporte público. "Estudiemos la gestión, incluida la gestión directa", dijo, para recordar que este punto figura en el pacto de gobernabilidad suscrito en junio con el PSOE.

Lage Tuñas avanzó además que antes del 30 de septiembre de este año comenzarán los contactos entre los grupos municipales para elaborar el presupuesto del próximo año.