Ha hecho casi de todo: publicidad,ilustración, animación y hasta docencia, pero por encima de todo es dibujante de cómic. Antonio Navarro presenta en Viñetas su última obra, Homónimos, una mezcla de estilos en la que varios personajes distintos comparten su nombre.

De los muchos estilos y narrativas que confluyen en Homónimos, ¿cuál define al Antonio Navarro dibujante?

Yo creo que lo que define es el conjunto, la diversidad. Entiendo que hay rasgos gráficos para quien esté interesado en ver mi trabajo que pueden identificarme y que son propios.No lo analizo, busco la forma que acompaña a la historia de la mejor manera.Yo me busco en la diversidad.

Cada Antonio Navarro de Homónimos es diferente, ¿tiene cada uno parte de usted?

Sí, todos.En el fondo, todas las novelas y cómics tratan de los propios autores. Cuando a Flaubert le preguntaron quién era Madame Bovary, dijo que era él. Pues yo soy todos los Antonios de Homónimos. No soy ni un asesino en serie, ni un escultor de los años 60; la anécdota de cada uno de ellos pertenece a su vida,transformada por lo que supone la ficción. Hay aspectos de cada uno de los personajes que son parte de mí. Es la reflexión de fondo del libro.

Viñetas 2019 cuenta en esta edición con creadores que se salen de los moldes. ¿Por qué han contado con usted?

Creo que soy un autor atípico, me ha gustado tocar muchos palos.He transitado desde la publicidad, el cine de animación a los cómics. He ido yendo y viniendo del cómic con una regularidad menor que otros autores. Aunque he trabajado en el universo mainstream en otros ámbitos, he querido reservar el cómic como mi medio de expresión más personal e íntimo, por eso soy un poco raro.

Como dice, siempre ha compaginado el cómic con otras disciplinas.¿Cree que a día de hoy en España se puede vivir del cómic sin hacer esto?

Es complicado. Conozco muchísimos compañeros que han tenido que hacer lo mismo que yo.La industria en España no acompaña, por desgracia, pero tampoco en la literatura. La gente no lee, ni novelas ni cómics. No digo que no sea posible, pero solo puede una minoría.