La Audiencia Provincial ha desestimado el recurso de un hombre condenado por conducir a gran velocidad y provocando daños al mobiliario público, sin carné, sin seguro e intentando huir de la Policía Local. El Juzgado de lo Penal número 2 había condenado al hombre a quince meses y un día de prisión, así como a no poder conducir vehículos a motor o ciclomotores en un plazo de cuatro años y ahora la Audiencia Provincial confirma esta sentencia.

La condena a este conductor incluye una indemnización de 3.315 euros al Concello de A Coruña por los daños producidos en el intento de huida, que se saldó con el ataque a dos bancos, dos árboles y una farola. Los hechos se remontan al 10 de junio de 2017, sobre las dos de la madrugada. Entonces, el condenado conducía un coche sin seguro con el permiso de su propietario. El hombre, que carecía de permiso de conducir porque el de moto, el único que tuvo en su vida, lo había perdido al quedarse sin puntos, circulaba a gran velocidad por la calle Ángel Senra, que es peatonal.

Alertados por los vecinos, los agentes de la Policía Local acudieron a la zona y le dieron el alto, por lo que, según consta en la sentencia, el hombre intentó escapar del lugar circulando marcha atrás por esta calle, colisionando con dos bancos. En uno de ellos estaba un vecino sentado, que tuvo que levantarse para evitar ser atropellado, tal y como recogen los hechos probados de la sentencia.

Ignorando las señales del 092 que le indicaban que parase, el hombre circuló en sentido contrario por la calle Oidor Gregorio Tovar a gran velocidad, de modo que colisionó contra una furgoneta que estaba aparcada, pero siguió su marcha hacia la confluencia de la ronda de Outeiro con la avenida de A Sardiñeira, donde tuvo que ser esquivado por, al menos, un vehículo para evitar un choque.

Cuando el hombre llegó al estacionamiento de A Sardiñeira que hay en las inmediaciones del centro cívico de Os Mallos y comprobó que no podía seguir con su huida, según consta en la sentencia, embistió contra una farola y, tras derribarla, le pasó por encima a gran velocidad y siguió su marcha. Eso provocó que los agentes que le seguían le perdiesen de vista.

La defensa del conductor alegó "presunción de inocencia", un argumento que la Audiencia no aceptó, ya que uno de los policías que intervino en la persecución identificó al autor de los hechos "sin ningún género de duda" ya que le "conocía de dos actuaciones anteriores", según consta en el fallo de la Audiencia. Tampoco se tiene en cuenta la idea de la defensa de que el hombre condenado no era el que conducía el vehículo, ya que el propietario del coche confesó que era el acusado el que pilotaba su vehículo, aquella noche. La sala considera que ese argumento "no es mínimamente verosímil". A pesar de que la Audiencia considera que el condenado es autor de los hechos, declara de oficio las costas, ya que no cree que el hombre obrase "de mala fe".

Contra esta resolución cabe interponer recurso de casación, por lo que la sentencia no es firme todavía. Los daños producidos en el mobiliario público „propiedad del Concello de A Coruña„ se cuantificaron en 4.435 euros, los de la furgoneta no constan en la sentencia.