La basura sigue colapsando Nostián. Mientras el Concello y la concesionaria del tratamiento de basura, Albada, ultiman el acuerdo con Gestán Medioambiental para enviar los rechazos acumulados en la planta de Nostián al centro privado As Pías, en Sobrado, las instalaciones siguen recibiendo cada día basura que se apila dificultando la circulación de los camiones. Los trabajadores detallan que estos residuos se colocan ahora hacia el núcleo de Nostián, en la zona de los fosos, porque en la explanada de acceso ya no hay espacio y se encuentra vallada.

Hace unas semanas, el Concello informó que había ya 7.000 toneladas de rechazos „basura que no se puede reciclar„ amontonadas en las instalaciones, pero la plantilla reconoce que esa cifra "ya es mayor", lo que hace que la situación se torne insostenible. "Necesitamos un acuerdo urgente", apuntan. Además, el calor de estos días „los termómetros rondan los 30 grados„ provoca que los olores que salen de Nostián sean más fuertes.

La acumulación de la basura se originó en abril, cuando la Consellería de Medio Ambiente prohibió a Albada, concesionaria de la planta de Nostián, seguir depositando residuos en la planta de Grixoa, cerca de Santiago, tras las protestas de vecinos por los olores. Además, desde hace tiempo, existe una saturación de los depósitos de residuos abiertos en Nostián para estos rechazos, lo que obligó hace años a Albada a buscar una salida en vertederos externos.

Sin la opción de Grixoa, el Concello busca otras alternativas. La falta de espacio en Nostián no es el único problema al que se enfrenta, pues la Xunta ha abierto un expediente sancionador a Albada planta por acumular residuos al aire libre. El resultado se conocerá a partir del 6 de septiembre, fecha límite para que la empresa presente alegaciones. A partir de ahí, la Xunta decidirá si archivar el caso o hacer una propuesta de sanción. La multa podría ser de entre 20.000 y 200.000 euros.

A finales de julio, y tras una reunión entre la alcaldesa Inés Rey y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, parecía que la solución estaba clara: trasladar la basura de Nostián a Sogama. La Administración Autonómica propuso al Gobierno local una rebaja de diez euros por tonelada para el traslado de los rechazos. El precio de 55 euros por tonelada solo se mantendría para las más de 7.000 que se acumulan en Nostián, mientras que la tarifa ordinaria, que se tendría que abonar más adelante, oscila entre los 68 y 69 euros.

El Concello dijo que estudiaría la viabilidad económica de esta propuesta que finalmente rechazó por su alto precio. Por lo que la alternativa es un vertedero privado. Ahora el Ejecutivo local se encuentra en negociaciones con Gestán Medioambiental para determinar el coste del traslado a la planta As Pías. Aunque no se ha publicado una cifra, el precio de llevar la basura sería menor que el que ofrecía la Consellería de Medio Ambiente. La tarifa oscila entre los 40 y 47 euros „el precio depende de la tipología de la basura„, lejos de los casi 55 que ofrecía la Xunta como rebaja.

El precio en Sobrado es similar al que Albada ya abonada por el envío de basura que no se puede reciclar a Grixoa, dentro de los márgenes económicos del contrato por el que el Concello le había adjudicado la construcción y gestión de la planta de residuos coruñesa.

El Gobierno local no busca solo una instalación en la que depositar los rechazos que no se pueden recuperar en Nostián, ahora colapsado, sino una planta que se utilizaría de manera estable y a largo plazo para evitar acumulaciones como la de ahora, que obliga a los trabajadores a "ir con mucho cuidado" para evitar incidentes.