La Policía Local de A Coruña detuvo en la madrugada del domingo a un hombre de 33 años que huyó de los agentes tras desprenderse de un teléfono móvil que había robado en la zona del Orzán y adentrarse en el mar junto a la coraza de la bahía para escapar de los policías. El arrestado, de nacionalidad tunecina, se resistió a los efectivos policiales, causó daños a un agente y fue denunciado por estas acciones, además de por un delito de hurto.

La detención se produjo sobre las seis de la madrugada. Un cuarto de hora antes el 091 fue requerido en la zona de pubs del Orzán por responsables de más de un local de hostelería que advirtieron que un varón había sustraído teléfonos móviles a clientes, comportamiento que, añadieron, había repetido en otras fechas. El hombre se confundió entre la gente para tratar de ser interrogado por los policías y al ser localizado en las inmediaciones del lugar poco después se negó a identificarse y huyó a la carrera. En la persecución, uno de los agentes observó como el individuo arrojaba un teléfono al suelo, y en su intento de no ser alcanzado bajó a la playa del Orzán y se introdujo en el mar.

Los policías tuvieron que sacar del agua al hombre y una vez en la orilla de la playa continuó con su actitud de resistencia y forcejeo, por lo que tuvo que ser reducido por los agentes, que precisaron de la presencia de otra dotación policial. El individuo persistió en su negativa a identificarse, causó daños a un agente y negó los hechos por los que se le había perseguido, sin aclarar por qué había arrojado un teléfono al suelo cuando escapaba. Ya en las dependencias policiales, adonde fue trasladado, el detenido ofreció sus datos antes de ser llevado a los calabozos.