El incremento de los delitos sexuales en la primera mitad del año en la ciudad en comparación con el primer semestre de 2018, del 100%, plantea interrogantes a los sindicatos sobre la suficiencia de efectivos para atender este tipo de casos. Las centrales sindicales de la Policía Nacional tienen claro que el personal actual que existe para poder atender las investigaciones y proteger a las personas afectadas por delitos contra la libertad y la indemnidad sexual todos los días de la semana es insuficiente.

La Unidad de Familia y de Atención a la Mujer (UFAM) de la Policía Nacional es la encargada de atender a las víctimas de violencia machista, malos tratos, delitos con menores y violencia sexual. Cuenta con trece agentes: seis en el grupo de Investigación, que valora el riesgo inicial del caso y hace prevención, y siete en el de Protección y Seguimiento, que decide cómo actuar según el riesgo determinado y establece las adecuadas condiciones de seguridad para los afectados. La plantilla no ha aumentado ni decrecido en los últimos dos años, aseguran las organizaciones sindicales, aunque los casos sí han subido, lo que obliga, creen, a "un incremento de efectivos en el catálogo de puestos de trabajo asignados a la UFAM", apunta Sandra Castro, secretaria general del SUP.

"No dan las horas del día. Hay compañeros, especialmente en el grupo de Protección y Seguimiento, que acumulan de este año y de los anteriores hasta 70 víctimas con las que trabajan los 365 días del año. Están desbordados. Es una unidad que necesita personal específico, con formación especializada", apunta Castro.

Otros sindicatos coinciden en señalar que la UFAM "debería de tener más personal y poder atender investigación y protección todos los días de la semana", ya que la mayoría de los delitos de malos tratos se producen en fines de semana y por las noches, que es precisamente cuando no hay personal especializado de servicio. Ello motiva que gran parte de los casos se tengan que tramitar en las oficinas de denuncias, donde la plantilla tampoco es suficiente y no cuenta con una formación específica en violencia machista.

La UFAM sufrió hace un año una limitación de su actividad y durante el verano redujo su atención de lunes a viernes solo a las mañanas. La subdelegada del Gobierno en Galicia, Pilar López Rioboo, prometió reforzar los horarios, que no se produjo hasta octubre, cuando, después de las reclamaciones de los sindicatos policiales y tras los colapsos registrados en las oficinas de denuncias, se volvieron a atender por las tardes los casos de delitos sexuales y violencia machista. En esta unidad cada mujer afectada, según el riesgo determinado, tiene un policía asignado, con el que puede contar 24 horas y todos los días del año.

El doble que en 2018

El primer semestre de este año registró 42 delitos sexuales en la ciudad, frente a los 21 de los primeros seis meses del año pasado, según reflejan las estadísticas publicadas esta semana por el Ministerio del Interior. El repunte es sensiblemente mayor que el que presenta el conjunto de la comunidad gallega, del 31,5%, y el de la provincia, del 41,1%. Otro incremento entre enero y junio fue el de los robos con violencia e intimidación, de 86 a 93 (el 8,1%).

Una tendencia contraria experimentaron los robos cometidos en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, que cayeron un 35,8%, de 254 a 163, de los que 102 fueron en domicilios; los delitos graves y menos graves de lesiones y riñas tumultuarias, que bajaron de 47 a 33, casi un 30% menos; los hurtos, con un descenso del 13,2%; y los robos de vehículos, que en un año pasaron de 31 a 19.