El Concello mantiene sin formalizar la adjudicación a la unión temporal de empresas (UTE) FCC Medio Ambiente-Ingeser Atlántica del contrato de recogida y transporte de basura desde que la junta de gobierno lo aprobara hace un mes debido a la presentación de dos recursos judiciales contrarios a la decisión. Las compañías que quedaron en segunda y tercera posición, la UTE formada por Copasa, Geseco y SetecBuilding y la actual concesionaria, Cespa Ferrovial, acudieron a los tribunales para denunciar irregularidades en el procedimiento. Mientras los jueces no resuelvan estas demandas, el Gobierno local confirma que mantiene en suspenso la firma del acuerdo.

Una de estas empresas, la liderada por Copasa, ya había acudido al Tribunal Administrativo de Contratación de la Xunta para quejarse del mantenimiento en el proceso de la compañía ganadora del mismo tras ser propuesta su exclusión por parte de los técnicos del área de Medio Ambiente en abril. Pese a que el órgano gallego paralizó la licitación, finalmente emplazó a la empresa a recurrir el acto final, el de adjudicación, por ser el momento adecuado para analizar la situación. Ahora, tanto esta UTE como la actual concesionaria han recurrido al juzgado para evitar que FCC Medio Ambiente e Ingeser Atlántica se haga con este contrato, que supone alrededor de doce millones de euros al año por un plazo total de ocho ejercicios. La polémica surgió en abril con el dictamen de valoración técnica de las seis propuestas presentadas al concurso, donde el jefe de servicio y el director de área de Medio Ambiente concluían que FCC e Ingeser incumplían los requisitos sobre la parcela en la que planeaban instalar el parque de maquinaria. Se trataba de un solar, ubicado en la carretera de San Pedro de Visma a Mazaído, en el que, según los técnicos, solo se podían autorizar "usos y obras provisionales" por lo que no podría utilizarse para el fin pretendido por la empresa. Pese a esta resolución, la mesa de contratación, según el acta de la reunión, acordó "por unanimidad" aceptar la oferta de la UTE por entender que el terreno para construir la nave debería tener "adecuación a la normativa urbanística" no en el momento de la presentación de la oferta sino desde que arranque la actividad con la nueva concesionaria, tal como establece el pliego de condiciones. "Los licitadores deberán incluir en su oferta la documentación necesaria que avale la disponibilidad de las nuevas instalaciones desde la fecha de inicio del contrato" cita textualmente el documento municipal. Tras esta decisión, la compañía quedaba ya en primera posición y, después de la valoración de las ofertas económicas, seguiría en este puesto, seguida de las dos empresas que han recurrido a los juzgados.

Cambio de gobierno

Tras descartar el Tribunal Administrativo de Contratación de la Xunta actuar antes de la adjudicación del contrato, el procedimiento continuó hasta la propuesta de la mesa de contratación de otorgar a FCC Medio Ambiente-Ingeser Atlántica el servicio de recogida de basura. Sucedía esto a pocos días del cambio de Gobierno local, semanas después de las elecciones municipales en las que Marea Atlántica no revalidó el Ejecutivo, por lo que prefirió dejar el último paso al PSOE. "La adjudicación corresponderá al Gobierno entrante", explicaban en aquel momento fuentes municipales.

El pasado 5 de agosto la Junta de Gobierno Local, ya con el Ejecutivo socialista, aprobó la adjudicación, así como la del otro lote del concurso, el que se refería a la contenerización de los residuos urbanos. Con 2,7 millones de euros, la unión temporal de empresas Valoriza Servicios Medioambientales-Arias Infraestructuras se encargará de este servicio. Entre las mejoras del contrato se contemplan la asunción de los trabajadores actuales en las mismas condiciones y que el 35% de recipientes sean accesibles a personas con discapacidad.