El BNG y el PSOE se aliaron ayer en la comisión de Medio Ambiente del Parlamento gallego para pedir que se paralice el traslado de basura desde Nostián a Sobrado dos Monxes, tras el acuerdo entre la concesionaria municipal Albada y Gestán Medioambiental hace quince días. Los votos del PP, con mayoría absoluta, frenaron la iniciativa pero el debate entre las partes fue tenso. Fuentes municipales se limitaron a apuntar que los residuos que salen de la planta tienen los "permisos adecuados" y que cumplen la ley.

El nacionalista Xosé Luís Rivas presentó una proposición no de ley alegando que la basura que procede de A Coruña supera "ampliamente" los límites establecidos por la normativa autonómica para entrar en un "vertedero de residuos no peligrosos". Es más, apuntó que la prohibición de la Xunta de que los rechazos „basura que no se puede reciclar„ continuaran yendo a las instalaciones de Grixoa, cerca de Santiago, en abril se debió a este incumplimiento. "Nostián tiene que funcionar, que preparar un compostaje decente, bien hecho, que sea posible vender como fertilizante. Es decir, hay que compostar", explicó.

Los socialistas, que gobiernan en A Coruña, presentaron a través de los diputados Patricia Vilán y Xoaquín Fernández Leiceaga, una enmienda de modificación pidiendo a la Xunta que trabajara "conjuntamente" con el Concello para dar una "solución alternativa" a los rechazos que, admitían "superan" los límites marcados. La propia Vilán reconoció en el debate de ayer que la calidad del compost es "ahora mismo insuficiente" y culpó al Gobierno gallego de no invertir en "educación ambiental" para separar residuos de que los rechazos lleven una carga orgánica más alta de lo permitido. La diputada pide una "solución coordinada" entre administraciones porque advierte de que "la Unión Europea va a prohibir los vertederos".

Desde el grupo Común da Esquerda, Marcos Cal, también reclamó "coordinación" y "afrontar y reflexionar" sobre la gestión de residuos en la comunidad. El diputado recalcó que la planta de Sogama marca precios "abusivos" y exigió "terminar con la quema y con los vertederos".

Los votos del PP tumbaron la iniciativa y el diputado Gonzalo Trenor cargó contra el proyecto de Nostián. "Evidencia un modelo de tratamiento de basuras fracasado, un paripé que consumió una ingente cantidad de recursos", espetó, añadiendo que "es un fracaso del modelo socialista, sin matices ni paliativos". Relató, saltándose el período de gobierno de mayoría absoluta del PP en María Pita, el paso de Marea Atlántica por el Concello. "Sé que tenía la intención de modificar muchísimas cosas en Nostián que no funcionaban pero es verdad que no lo hicieron", resumió.

El popular defendió que el modelo de gestión de Sogama "no genera los problemas de Nostián". Pese a las denuncias de socialistas y nacionalistas, Trenor expuso que A Coruña no ha incumplido ninguna normativa pero alertó de que la Xunta estará "vigilante" y que si hay alguna irregularidad: "Seremos los primeros en denunciarlo".

El nacionalista respondió al popular criticando también la planta autonómica de basuras. "El desastre de Sogama no puede limarlo con el mal funcionamiento de Nostián", denunció y le recordó que la Alcaldía coruñesa fue del PP durante un mandato. Otro de los puntos de la iniciativa se refería al peligro que, dice, existe en los alrededores de la planta de Sobrado. Según Rivas, está entre los ríos Mandeo y Tambre por lo que considera que la proyectada ampliación de la instalación es "un suicidio medioambiental". El texto pedía también que no se permitirá construir un nuevo vaso en la propiedad de Gestán.