La Compañía de Tranvías de A Coruña reclama al Ayuntamiento el abono de facturas pendientes que corresponden al mantenimiento del tranvía turístico desde julio de 2011, fecha en la que el servicio dejó de funcionar porque el Concello, durante el mandato del PP, suspendió su uso a raíz de unos problemas técnicos ocurridos ese año. La concesionaria del transporte público ha llevado esta reclamación al juzgado a través de un recurso, al que el Concello se personará, según aprobará mañana en una Junta de Gobierno local.

Tranvías explica que entre 2011 y 2014 siguió realizanzo análisis técnicos e instalando sistemas de análisis en los vehículos aunque el tranvía estaba fuera de servicio de forma indefinida. Además, añade, la empresa colaboró con el Concello en las obras realizadas en el tramo del tranvía desde la glorieta de los surfistas hasta las Esclavas y continuó con labores de mantenimiento bianual del sistema eléctrico, de seguridad, las vías y otros apartados. En estos años Tranvías solicitó al Ayuntamiento el abono de lo adeudado. "Ante la falta de respuesta tanto sobre el abono de las facturas como del futuro del servicio", explica el director de Tranvías, Juan Ignacio Prada, "se determinó a finales de 2014 notificar al Ayuntamiento que la compañía debía suspender los trabajos de mantenimiento hasta recibir el pago de lo adeudado".

Desde 2015 la concesionaria sigue pagando los gastos de electricidad y alarma del tranvía turístico y ha alertado al Concello del "deterioro progresivo" de las instalaciones por la falta de mantenimiento. La administración local sigue sin enviar a la empresa notificaciones sobre los gastos acumulados ni sobre el futuro del servicio, señala Tranvías, razones por las que recurre a la vía judicial para reclamar el abono de sus servicios en una transporte sin uso desde hace más de ocho años.

El Gobierno local del PP ordenó en julio de 2011 la suspensión del servicio tras detectar daños en las vías, concretamente a la altura del edificio de Hacienda, en el Orzán, que podrían afectar a la seguridad. Los desperfectos fueron detectados por los técnicos municipales encargados del mantenimiento de las instalaciones después de que se registrase un leve descarrilamiento en el desvío del raíl en la zona del aparcamiento del paseo marítimo. El servicio no volvió a ponerse en funcionamiento debido al elevado coste de reparación de las vías. Marea Atlántica no llegó a aclarar qué planes tenía respecto al tranvía turístico cuando gobernaba, y el PSOE de momento tampoco lo ha hecho.

Tarjeta Millennium

La Junta de Gobierno Local también aprobará mañana el personamiento en otro recurso interpuesto por la Compañía de Tranvías por el pago de facturas ordinarias, por importe de casi 3 millones de euros, que considera que el Concello debe abonar por asumir la parte que le corresponde financiar de la tarjeta Millennium y los bonos sociales del transporte público entre octubre de 2017 y diciembre de 2018. Este pago está incluido en el suplemento de crédito que el pleno municipal aprobó el pasado 31 de julio y que la concesionaria ha recibido esta semana.