Las cámaras del sistema de tráfico Vía Prioritaria Vigilada, que implantó el Gobierno local del PP como alternativa al carril bus, serán usadas ahora por el Concello para multar a los conductores que aparquen en doble fila. Los aparatos fueron instalados durante aquel mandato y quedaron listas para sancionar a quienes infringieran la normativa de tráfico, pero no llegaron a funcionar por el cambio de gobierno que se produjo en 2015, ya que Marea Atlántica decidió no usarlas para este fin.

Las cámaras están ubicadas en calles como Federico Tapia, Rosalía de Castro, plaza de Pontevedra, San Andrés, San Juan, Fernando Macías y Juan Flórez, que coinciden con algunos de los lugares donde más se practica el aparcamiento en doble fila.

Estos equipos son diferentes de los destinados al control del tráfico por parte de la Policía Local, así como de los que pretendían sancionar a quienes se saltaran los semáforos, que se hallan inactivos por problemas legales. Las únicas cámaras usadas hasta ahora para multar son las de los accesos a la Marina, que el año pasado impusieron 22.220 sanciones, frente a las 36.000 de 2017, la gran mayoría a no residentes en la ciudad.