La expedición del Almería, rival que esta tarde juzgará la capacidad de reacción del Deportivo para salir de su crisis y de su entrenador para defender el cargo, que pende de un hilo, aprovechó la agradable tarde de ayer para pasear por el centro de A Coruña. Su alojamiento a pie de costa animó a los futbolistas a seguir la variedad de deportes urbanos en la explanada de O Parrote, tomar algo en las terrazas de la Marina y pasear por las calles comerciales.