La integración de un centro de salud en el edificio del mercado de Santa Lucía, compromiso anunciado por la alcaldesa tras la primera reunión institucional con el presidente de la Xunta a finales de julio, se tropieza con el juicio del arquitecto del diseño original del inmueble, José Manuel Gallego Jorreto, a quien el Gobierno local anterior encargó la rehabilitación del mismo, cuyo proyecto rechazó la Xunta. Jorreto advierte de que la convivencia de los usos sanitario y comercial perjudicará al barrio.

"La calle en cuesta, de difícil acceso, supone un problema para un centro de salud en esa ubicación, con parada complicada para la ambulancia. Un ambulatorio dificulta y empeora la situación del mercado, que para mí es el elemento principal del barrio", explicó ayer Jorreto en Radio Coruña.

El Gobierno local socialista aseguró un día después de la reunión entre Inés Rey y Alberto Núñez Feijóo que aprovecharía el diseño de Gallego Jorreto para rehabilitar el inmueble de Santa Lucía, encargado por el Ejecutivo anterior, pese a que Sanidade consideraba que no era un proyecto viable.

Con el acuerdo entre el Concello y la Xunta, el centro de salud de Federico Tapia se deberá mudar al mercado de Santa Lucía, donde convivirán los usos comercial y sanitario en el mismo espacio y en el mismo volumen, con el ambulatorio en la primera planta y la plaza de abastos a cota cero.