Un hombre de 94 años fue hallado muerto ayer a las 20.14 horas en su vivienda de la calle Castrillón, a la que los bomberos entraron por una ventana. El fallecido vivía solo y hacía varios días que no era visto, por lo que se dio la alarma. Los bomberos vieron el cuerpo sobre el suelo de la cocina, en la que debió darse un golpe al caer, ya que había restos de sangre. El accidente debió ocurrir hace varios días, ya que el cadáver había empezado a descomponerse.