El primer encuentro entre PSOE y PP para la conformación de los presupuestos municipales acabó ayer con la impresión "decepcionante" de la portavoz popular, Beatriz Mato, y con la de su homólogo en el Gobierno local, José Manuel Lage, de que ambas formaciones, llegado el momento, podrían colaborar en la redacción de las futuras cuentas.

En lo que sí estuvieron de acuerdo fue en no poner "cordón sanitario" ni "líneas rojas" para la redacción del presupuesto, de modo que el Gobierno local abre la puerta a que las propuestas del PP „como las de los demás grupos„, "si son positivas y encajan" con su proyecto, sean "tenidas en cuenta".

A pesar de ello, Lage destacó que el Gobierno local tendrá un trato prioritario con Marea Atlántica y con el BNG para definir el presupuesto municipal, ya que son las dos formaciones con las que cerró un acuerdo para el mandato.

"Salimos igual que entramos. Esperaba más, al menos, documentos en los que hubiese un borrador. Para esto nos podrían haber convocado hace semanas", dijo ayer Mato, que lamentó ser ella la última que pasa por las oficinas municipales para hablar sobre las cuentas del próximo año, "pese a ser la fuerza más votada y representar a casi 38.000 coruñeses".

Para Mato, la reunión de ayer fue un "diálogo ficticio", a pesar de ello, aseguró que su formación no marcará "ninguna línea roja para intentar llegar a un acuerdo", cuando menos, "en alguno de los ejes".

Lage defendió, como en las anteriores reuniones, mantenidas con el resto de grupos con representación en María Pita, que las cuentas de 2020 se basarán en la "reactivación económica de la ciudad, las políticas de bienestar social y la apuesta por la sostenibilidad". El Gobierno local tiene intención de "darle prioridad a todo aquello que tenga que ver con la movilidad".

Lage aseguró que, una vez acabada la primera fase de configuración del presupuesto con Marea Atlántica y BNG, se presentará el proyecto de las cuentas, que "no será cerrado sino que responderá a los intereses de la mayoría social de A Coruña" y será en esta fase en la que tanto Ciudadanos como PP podrán realizar sus propuestas, para ver si tienen cabida en el documento. La intención del Gobierno local es conseguir el apoyo de Marea y BNG para que el presupuesto pueda estar aprobado a lo largo del mes de enero.