Servicios Sociales ha detectado un incremento de personas sin hogar que viven en la calle. Los técnicos de este departamento municipal hacen recorridos por la ciudad, en diferentes horarios, para detectar a las personas que pasan la noche en la calle, identificarlas y así darles información sobre los recursos disponibles.

La Memoria de Gestión de 2018 revela que los colectivos más afectados por esta situación son mujeres e inmigrantes, la mayoría de ellos solicitantes de asilo. Además, los técnicos alertan del incremento de jóvenes de entre 18 y 25 años que duermen a la intemperie.

Los datos municipales indican que, a lo largo de 2018, hubo 170 personas que durmieron en la calle en diferentes momentos del año. El incremento en solo un año ha sido del 36%, pues en 2017 el dato era de 125 personas. También ha aumentado el número de usuarios que tienen problemas con la vivienda, o bien piden dinero para buscar alojamiento, pasan la noche en un albergue o no pueden pagar su alquiler. Servicios Sociales ha contabilizado un total de 465 personas en estas situaciones, de las cuales un 84,3% son mujeres.

Aunque el Concello suele activar un protocolo en estos casos para evitar las pernoctaciones en la calle, hay personas sin hogar que rechazan la ayuda, por lo que es complicado dar respuesta a los sin hogar en riesgo de exclusión social. Las personas que sí están dispuestas a ser atendidas pueden ser derivadas a entidades como Padres Rubinos, que cuenta con un albergue. El centro Abeiro de baja exigencia cerró sus puertas el pasado octubre por carecer de permisos, pero la concejala de Benestar Social, Yoya Neira, adelantó en el pleno que se están buscando alternativas para reabrirlo.

El área de Servicios Sociales señala tres situaciones que se repiten en las calles de A Coruña. Por un lado están las personas sin techo que se asientan en un determinado sitio de la ciudad para pasar la noche de manera permanente, mientras que otros realizan estancias itinerantes en diferentes lugares. Además, existe una "proporción importante" de personas que acaba en la calle por determinadas circunstancias, en general por crisis vitales, por lo que se trata de una situación transitoria a la que se puede dar solución.