El Gobierno municipal descarta abrir la convocatoria de 2019 de ayudas a la rehabilitación, aún pendiente. El Ejecutivo local alega que hay un atasco en la tramitación, acumulado desde 2017. y que están empleando sus esfuerzos en poner al día las solicitudes abiertas, por lo que el proceso de 2019 quedará para el año próximo.

El Concello revela sus planes en una de las respuestas a las preguntas escritas realizadas cada mes por la oposición, en este caso, de Marea Atlántica, que interpela al Ejecutivo del PSOE sobre cuándo ha pensado lanzar la convocatoria de ayudas municipales correspondiente a este 2019.

El área de Urbanismo, que dirige Juan Díaz Villoslada, explica que la convocatoria de 2019 se traslada a 2020. "Esto se debe al retraso en la tramitación de los expedientes de 2017, que hizo que los de la convocatoria de 2018 se iniciasen en el año 2019, estando aún en tramitación", relata la respuesta municipal.

En total, el número de solicitudes en los años 2017 y 2018 fueron 763. La hucha de la convocatoria de 2019, prosigue el departamento de Urbanismo, está siendo empleada para la concesión de subvenciones de las convocatorias previas. "Si convocásemos en este momento, lastraríamos de nuevo las ayudas que acumulan retrasos y desajustes presupuestarios de 2017", razona.

En la liquidación del presupuesto del pasado año, figura que se reservaron para el programa de ayudas a la rehabilitación en 2018, tras aumentos en la partida, 1,22 millones de euros y que se pudieron adjudicar 1,07 de los mismos, un 88%. En 2017, la partida final consignada era de 1,5 millones de euros pero solo se repartieron un 33%. Aquel ejercicio el presupuesto entró en vigor a mitad de año tras la cuestión de confianza.

En 2016, el presupuesto para esta línea de ayudas (sumado el remanente de 2015) fue de 1,26 millones de euros. El crédito comprometido, según figura en la liquidación de aquel año, fue del 87% (1,11).

El exconcejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, razona que "la ampliación y mejora de las ayudas municipales a la rehabilitación, facilitando trámites, aumentando los fondos para la zona Pepri e introduciendo criterios sociales para favorecer las rentas más bajas" se tradujo "en un aumento de la solicitudes hasta casi el límite de la partida presupuestaria de 2018".

Cambios en la ordenanza

Durante el mandato anterior se produjeron cambios en la ordenanza de las ayudas a la rehabilitación para introducir criterios de renta y para ampliar la aportación que recibían los propietarios de viviendas de la zona del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de Pescadería Ciudad Vieja, pasando de los 5.000 euros como máximo que se entregaban antes por cada una de las viviendas a los 15.000 que se pueden entregar ahora. También para que los dueños de casas ubicadas en los núcleos tradicionales pudiesen optar a estas subvenciones.

Xiao Varela justifica que no pudieron aumentar el crédito de 2019 porque no tuvieron apoyos en su presupuesto. Espera que se mantengan los niveles de ejecución de 2018 y que en 2020 pongan en marcha la nueva convocatoria de ayudas, incluyéndola en el proyecto de presupuestos. "Por Marea Atlántica no va a quedar", señala el edil del grupo, con el que el Gobierno del PSOE tiene que negociar las cuentas.

En la Memoria de Gestión de 2018, los técnicos del departamento narran que el incremento de la partida supuso que se pasase de ejecutar "prácticamente la totalidad del gasto previsto para ayudas a elementos comunes y habitabilidad, y la totalidad en accesibilidad" a que la ejecución bajase al 75%. Para conseguir que se ejecute todo el presupuesto proponían que el Concello adoptase "alguna medida" que les agilice el trabajo.