Una empresa madrileña promueve la apertura de un espacio gastronómico en la planta principal del centro comercial Bulevar del Papagayo, que tendrá un acceso directo al exterior por la calle Panaderas. La iniciativa, que busca reunir a diferentes locales dedicados a la restauración, ha supuesto ya la marcha de dos de los tres únicos establecimientos que estaban ubicados en esa planta, en la que ahora solo continúa un centro de Pilates al fondo.

El resto de locales están desocupados, algunos de ellos desde hace años, por lo que sus frontales están cubiertos por lonas. La apertura de un espacio gastronómico en el Bulevar del Papagayo será la primera incursión en A Coruña de un negocio de este tipo, que en ciudades como Madrid ha experimentado un crecimiento en los últimos años, instalados en antiguos mercados de abastos y edificios singulares.

En Santiago existen dos nuevos recintos de esta modalidad, los mercados La Galiciana y Boanerges, mientras que en Vigo existe el denominado O Progreso 41 y en Pontevedra O Mercado, abierto el pasado mes de agosto. Por el momento, se desconocen los planes establecidos para su puesta en marcha, así como las características del proyecto.

Todos estos recintos se benefician del auge que vive la actividad gastronómica en España, que en A Coruña se ha traducido en diferentes propuestas como los certámenes Fórum Gastronómico y Atlántica Gastronómica, el Festival Bocata Gourmet Boucatise o el Concurso de Tapas Picadillo. En varias ocasiones se mencionó la posibilidad de abrir un espacio de restauración similar a los existentes en mercados tradicionales de otras ciudades en la planta superior del de San Agustín, aunque nunca llegó a ponerse en marcha en ese lugar, donde sí se han desarrollado actividades de venta de diferentes artículos, de productos ecológicos y el propio Festival Bocata Gourmet.

La instalación de un espacio gastronómico en el Bulevar del Papagayo puede suponer un impulso para este centro comercial, inaugurado en junio de 2008. La proliferación de superficies comerciales en la ciudad y la coincidencia del arranque de su actividad con el inicio de la crisis económica tuvo consecuencias negativas para este complejo, que siempre ha tenido una baja ocupación. El proyecto inmobiliario que se desarrolló en este lugar supuso la desaparición de las calles Papagayo y Tabares, que conformaban el antiguo barrio chino coruñés. El centro comercial cuenta con 11.941 metros cuadrados construidos que están repartidos en tres plantas.

El complejo dispuso en sus comienzos de diferentes tipos de establecimientos, que a lo largo del tiempo acabaron cerrando. En la planta donde se prevé la apertura del espacio gastronómico aún permanecen las instalaciones de una cervecería, con todo el equipamiento necesario para su funcionamiento. El supermercado Mercadona, que sucedió al Supercor que ocupó anteriormente el mismo local, es ahora su principal atractivo.

El proyecto del Papagayo tardó siete años en ejecutarse y cuenta también con 116 viviendas y casi un millar de plazas de aparcamiento, además de 2.326 metros cuadrados de oficinas y otros 2.000 en los que se aloja desde 2016 el vivero municipal de empresas Accede Papagaio. Cuando el alcalde Javier Losada inauguró el recinto, anunció que ese espacio estaría destinado a un centro de día para mayores.