La compañía balear El Ferrocarril de Sóller está interesada en adquirir algunos vagones en desuso que se utilizaron hasta el verano de 2011 sobre los raíles del tranvía turístico en el paseo marítimo de A Coruña. No es la primera vez en los últimos cuatro años que la empresa contacta con el Ayuntamiento y con la Compañía de Tranvías para hacerle saber su deseo de comprar unidades, repuestos y maquinaria de sus talleres para ampliar su flota de tranvías. Una delegación de la firma de Mallorca viajó hace unos meses a la ciudad para conocer el estado de los automotores eléctricos coruñeses, aunque de momento "no hay nada decidido", coinciden fuentes de Tranvías y de El Ferrocarril de Sóller.

"Seguimos estando interesados. Hasta ahora el Ayuntamiento de A Coruña no tenía muy claro qué hacer con el tranvía, algo que parece que ha cambiado", comenta el presidente de la compañía balear, Óscar Mayol, a Diario de Mallorca. "Hay una buena relación con El Ferrocarril de Sóller", apuntan fuentes de Tranvías, que añaden que los vagones sin utilizar están "en buen estado de conservación".

La flota coruñesa está compuesta por siete tranvías que datan de 1912, 1920, 1925 y 1937, señala la concesionaria del servicio: dos son históricos y propiedad del Concello y los otros se adquirieron a los tranvías de Lisboa y Oporto. No se usa ninguno desde hace más de ocho años, cuando el Gobierno local anuló el servicio por motivos de seguridad después del descarrilamiento de un vagón sin causar daños ni heridos en un tramo del paseo marítimo en la avenida Pedro Barrié de la Maza.

Desde entonces el Concello ha mantenido los raíles y el tendido eléctrico entre Las Esclavas y el castillo de San Antón, cuyo mantenimiento ha corrido a cargo de la Compañía de Tranvías, sin que ningún Gobierno local decidiese qué planes claros tenía respecto al tranvía turístico. El cambio al que alude el presidente de El Ferrocarril de Sóller enlaza con la desaparición de las vías del tranvía en los tramos entre las rotondas de As Ánimas y Adormideras y entre la Torre de Hércules y la fuente de los Surfistas, como anunció la semana pasada la alcaldesa, Inés Rey.

La eliminación de la infraestructura en el primero de los tramos se debe tanto al alto coste de la reparación de los raíles como a la reforma del paseo marítimo en esa zona que planifica el Ejecutivo, que comprende la reducción de carriles y el aumento de arbolado y espacios públicos. Rey añadió días después que tampoco habrá raíles entre la Torre y los Surfistas, ya que entrañan riesgos para la circulación, especialmente en las curvas. Lo que aún no ha resuelto el Concello es si las vías se mantendrán entre la fuente y el colegio Las Esclavas para reactivar el servicio en ese tramo del paseo. Un estudio técnico encargado por el Concello determinará si conviene o no conservarlo, explicó este mes el concejal de Movilidad, Juan Díaz Villoslada.

Si el tranvía desapareciese en todos sus tramos el Concello tendría que decidir qué hace con los vagones. El Ferrocarril de Sóller había contactado con el Ayuntamiento en 2015 después de que una de sus unidades sufriese un accidente en una de sus excursiones habituales con turistas desde la capital hasta Sóller. El tranvía histórico coruñés y el balear se construyeron casi el mismo año.