Gafas de sol de bambú, relojes de madera, gorras y mochilas de corcho y algodón orgánico. Estos son los productos de la empresa coruñesa de moda sostenible Livegens, que nació el pasado mes de junio y que ayer se hizo con uno de los tres premios MOCE, promovidos por la Fundación Ronsel y destinados a los mejores proyectos de autónomos y microempresas gallegas. En el caso del galardón de Livegens, el jurado tuvo en cuenta la vertiente social de esta empresa, que destina parte de sus beneficios al cuidado del medio ambiente.

El proyecto parte de los hermanos Javier y Aitor Ramón, dos jóvenes residentes en A Coruña y ligados por tradición familiar al cuidado al medio ambiente. Con Livegens, explica el primero de los hermanos, quisieron combinar esa inquietud con otro de su grandes intereses, la moda. Los productos son diseñados y comercializados por los dos hermanos, bien a través de su página web o a través de tiendas físicas. Este verano el producto estrella fueron las gafas, y ahora quiere posicionar sus relojes en la campaña de Navidad: estarán entre el 20 y el 22 de diciembre en el mercado das Nubes, en San Agustín.

Esta firma coruñesa rechaza los plásticos y solo emplea materiales naturales y biodegradables, pero la labor medioambiental de la empresa va más allá de las decisiones de diseño. Los Ramón la emplean como plataforma para difundir educación ambiental y promover labores de limpieza de de paisajes naturales. Así, han organizado rutas de senterismo sostenible en los Ancares y ayudado a cuidar las riberas del Sil y, el pasado verano, coordinaron una acción de limpieza en la playa de Santa Cristina, en Oleiros.

Aunque tienen clientes de "todo tipo", señala Javier Ramón, los compradores de los productos de Livegens son mayoritariamente jóvenes, de entre 18 y 40 años; una franja de edad a la que enfocan también sus actividades de concienciación medioambiental.

No es la primera vez que este empresario aspira a ganar un premio MOCE. Este bierzano de 35 años, asentado en A Coruña desde hace años, fue finalista en la edición de 2013 con la empresa que fundó ese año, Viajeros LowCost, en la que sigue trabajando. Ha compaginado esta actividad, así como otras colaboraciones empresariales y proyectos menores, con su formación académica, entre la que se cuentan las carreras de Turismo y Comunicación Audiovisual, dos másteres y un doctorado en Comunicación 3.0, además de con la investigación y la docencia universitaria.

Artesanía de madera en el Orzán

Los premios MOCE recibieron este año más medio centenar de candidaturas de proyectos de emprendimiento gallegos. De ellos, se seleccionó a una decena de finalistas, de los de los que un 60% eran mujeres. Entre los finalistas se encuentra otra empresa coruñesa, la tienda y taller de artesanía de madera El arce imaginario, que el carpintero canadiense Thomas Wiley regenta en la calle del Orzán.

Los finalistas presentaron en la mañana de ayer sus proyectos en la Fundación Paideia ante un jurado compuesto por una decena de entidades vinculadas al emprendimiento, que eligieron a tres ganadores. Además de Livegens, resultaron premiadas otros dos proyectos de la provincia de A Coruña. Cynthia Arias fue galardonada por su empresa Aleira Horta Ecolóxica, que se dedica al cultivo ecológico de hortalizas de calidad desde As Pontes.

Alejandra Montenegro, de Santiago de Compostela, fue la tercera elegida por Fisioadvisor, una herramienta virtual con la que se puede encontrar a profesionales de la fisioterapia en base a las especificaciones introducidas por los usuarios. Cada uno de los tres recibió, aparte de la medalla, 1.800 euros en metálico.

Colaboración pública y privada

Los premios cuentan con la colaboración de la Xunta y el patrocinio del banco BBVA. En el acto de ayer, además del responsable de Ronsel, Luis García Deber, intervinieron la Secretaria Xeral de Emprego de la Xunta, Covadonga Toca Carús, y el director de zona del banco en el Norte de Galicia, Daniel Miguel Fernández. Los tres ponentes destacaron la importancia de los autónomos en la sociedad gallega y la pertinencia de promover los valores de la innovación, la sostenibilidad, el impacto local, la creación de empleo y las medidas de conciliación e igualdad.

La Fundación Ronsel, que este año cumple dos décadas de existencia, anunció ayer que pondrá en marcha una nueva edición de los premios MOCE para el año que viene. Entre los valores a tener en cuenta en la convocatoria, según la entidad, se encuentran la promoción de la iniciativa emprendedora en Galicia, el apoyo a la puesta en marcha de actividades empresariales novedosas promovidas por autónomos y el fomento de la "creación de microempresas" en la comunidad.