Los pequeños pasos que da el desarrollo de la estación intermodal en el ámbito administrativo „el más reciente un nuevo cambio en el plan general en uno de los ámbitos urbanísticos, aprobado ayer en la Junta de Gobierno local„ tienen incierta repercusión sobre el terreno. Sobre todo porque no es que no haya comenzado ninguno de los trabajos de un proyecto originalmente anunciado hace más de una década y modificado después, sino porque las demoras en los procesos de licitación de las obras prioritarias condicionan las actuaciones posteriores. La primera intervención será la remodelación y ampliación de la estación de ferrocarril de San Cristóbal, asegura el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), y hasta que esta no concluya no empezarán las obras ni en la estación de autobuses ni el resto de actuaciones previstas.

En respuesta a una consulta de este periódico, Adif explica que el alcance de los trabajos ferroviarios obliga a ejecutarlos "en primer lugar" con el fin de "mantener el servicio ferroviario con las menores afecciones posibles durante las obras". "Una vez completadas estas obras que implican importantes afecciones a la explotación actual y necesitan ocupar casi la totalidad de los terrenos disponibles, se pueden acometer las obras en la estación de autobuses", señala el organismo estatal dependiente del Ministerio de Fomento.

El programa de trabajos de Adif consiste en la remodelación de la estación ferroviaria, con la playa de vías incluida. En esta se retranquearán las toperas y se modificará la configuración de vías y andenes para adaptar la infraestructura a la llegada de la alta velocidad. En el edificio de viajeros se rehabilitarán espacios y se crearán una nueva sala de embarque y una cubierta nueva sobre los andenes. Será también competencia estatal un vial subterráneo para acceder al aparcamiento en superficie de la estación, que a su vez será remodelado y tendrá 325 plazas, una pasarela peatonal para comunicar las avenidas de A Sardiñeira y O Ferrocarril y la peatonalización de la plaza de la estación.

Estas obras tendrán un coste estimado de 48,5 millones de euros y un plazo de ejecución de 28 meses. Y este plazo condiciona los demás. Si Fomento tendrá prioridad con la remodelación de la estación de tren, estos trabajos esperan aún su licitación, anunciada hace medio año por el delegado del Gobierno, Javier Losada, y por la alcaldesa, Inés Rey, de la mano del "compromiso del presidente Pedro Sánchez con A Coruña". Pero sin Gobierno estatal constituido ni, por tanto, Consejo de Ministros, el proyecto carece todavía de autorización para ser licitado.

Este retraso condiciona los demás. Cuanto más se demoren las obras en la estación, que ocuparán como mínimo los años 2020 y 2021 según los cálculos estatales, más tardará el traslado de la estación de autobuses a San Cristóbal, actuación que compete a la Xunta. Cuando anunció la licitación de la redacción del proyecto, el Gobierno gallego avanzó que sus trabajos no empezarían hasta finales de 2022 o principios de 2023. El ritmo que llevan los procesos augura que ello se produzca más tarde.

El Ayuntamiento tendrá a su cargo la configuración de los accesos a la futura estación intermodal, para lo cual ha sacado adelante un cambio en el plan general para habilitar un nuevo vial que enlace la avenida de Arteixo con la de A Sardiñeira, que será reurbanizada para mejorar la movilidad. Para este proyecto prevé incluir financiación en el presupuesto del próximo año.