La empresa Deporhostelería Playa Club, propiedad del Real Club Deportivo, solicitó al Concello hace más de un año la apertura de un complejo hostelero en los bajos de la playa de Riazor conocidos como Los Arcados. El proyecto, según los datos proporcionados por el Ayuntamiento, incluía la instalación de un restaurante, una heladería, máquinas expendedoras ( vending) y salones para actos. Todos estos negocios serían explotados por Producciones 15004, que ya gestiona el resto del complejo del Playa Club, de acuerdo con la política del Deportivo desde 2014.

La petición fue efectuada por el Deportivo durante el mandato presidencial de Tino Fernández y cuando el primer equipo tenía como objetivo prioritario el ascenso a Primera División. Posteriormente se produjo el cambio en la dirección del club y la frustración de la subida de categoría, circunstancias que pueden haber influido en los planes para Los Arcados. El inminente relevo que se producirá en la presidencia dejará el futuro de este proyecto en manos de los nuevos responsables.

Cuando Deporhostelería presentó la solicitud para la instalación de esas actividades, el Concello le informó de que Los Arcadas se encuentran en la zona de protección del litoral, por lo que cualquier actuación precisa de la autorización de la Demarcación de Costas. El edificio figura además en el catálogo de patrimonio del plan general con la protección más baja, la denominada ambiental, aunque para la realización de cualquier obra es necesario el permiso de la Dirección Xeral de Patrimonio. Este diario solicitó al Deportivo que le informase si había iniciado los trámites para la obtención de esas autorizaciones, aunque únicamente confirmó que había presentado la solicitud a la administración municipal.

Los bajos fueron construidos en 1970 como parte del complejo del Playa Club, de propiedad municipal y cedido en régimen de concesión a la familia Pereira. En 1999 la concesión, que concluirá en el año 2042, fue adquirida por el Deportivo por 2,4 millones de euros. Deporhostelería se encargó de gestionar el complejo, que posee una superficie de 3.000 metros cuadrados, de los que mil corresponden a Los Arcados.

En 2008 el club presentó un proyecto para instalar un restaurante en Los Arcados, pero en 2012 el Concello dio por desistida la solicitud al no haberse presentado la documentación que reclamaba. Deporhostelería anunció entonces que las obras se realizarían de forma inmediata con el fin de alquilar los bajos para la instalación de empresas hosteleras, aunque la iniciativa no llegó a ponerse en marcha.

Las dificultades económicas sufridas posteriormente por el Deportivo, que le obligaron a solicitar un concurso de acreedores, llevaron a que en 2014 se traspasara la gestión de la discoteca y el restaurante del Playa Club a la empresa Producciones 15004, entonces propiedad de Juan Rivera, quien desde este año tiene como socio a Juan Carlos Rodríguez Cebrián. En aquel momento el club informó que Deporhostelería acumulaba una deuda de 2,3 millones de euros, de la que 1,8 millones eran con el propio Deportivo. También se avanzó entonces que se trabajaba para traspasar otros espacios incluidos en la concesión, pero sin mencionar Las Arcadas, que en 2015 fueron cedidas junto con las terrazas a Producciones 15004, que tenía sobre esas zonas una opción preferente. Deporhostelería dejó finalmente de desarrollar actividades hosteleras ese mismo año, ya que ahora tan solo se dedica a gestionar los alquileres de los locales del complejo Playa Club a otras sociedades del sector.