El borrador de la nueva ordenanza reguladora de las ayudas municipales para la conservación y rehabilitación de edificios, que el Gobierno local prevé aplicar este año, mantiene el criterio para incrementar las cuantías de las subvenciones en función de la renta anual de los solicitantes, como en la modificación de la ordenanza aprobada por el Ejecutivo anterior. El texto, con el que el Concello pretende simplificar la tramitación de las ayudas y controlar las obras en los inmuebles que son objeto de ellas, añade actuaciones subvencionables, como las relacionadas con la mejora de la eficiencia energética o la reducción de los niveles de gas radón.

A continuación, algunas claves del borrador de la ordenanza, que desde 2006 ha pasado por seis modificaciones. Hasta el 21 de enero los ciudadanos pueden hacer aportaciones, que se podrían incluir antes de la aprobación en pleno del texto.

Cuantías. Cuando Urbanismo convoque la próxima solicitud de ayudas „sería este año y se tramitarían los expedientes acumulados desde 2018, ya que no hubo convocatoria en 2019„, los peticionarios podrán obtener hasta un máximo de 12.000 euros por vivienda (y un mínimo de 1.000 euros). El porcentaje máximo de subvención sería del 60% del importe de la obra a ejecutar, que se asignarían a las familias con menores recursos económicos que quieran mejorar la accesibilidad a viviendas con ocupantes con discapacidad reconocida o movilidad reducida y a los solicitantes de mejoras de habitabilidad en edificios construidos con licencia anterior a 1992 que no hayan sido objeto de reforma previa, en ambos casos hasta 12.000 euros.

Actuaciones y ayudas. Las reformas de fachadas o cubiertas, la sustitución de calderas o ventanas y la instalación de sistemas de reducción de consumo, todas medidas para mejorar la eficiencia energética de los edificios, podrán recibir ayudas que equivalgan al 30% del coste de la obra y hasta 3.000 euros por vivienda. La instalación de ascensores y elementos comunes pueden ser subvencionadas con el 50% del importe y un máximo de 6.000 euros, porcentajes y cantidades que variarán en función de los ingresos anuales de los solicitantes. El mismo criterio se aplicará para asignar ayudas para mejorar la habitabilidad, con tramos del 10% al 60% del coste y de 2.000 a 12.000 euros. Aislamientos acústicos frente al ruido; protección contra humedades o evacuación de aguas y residuos; y actuaciones para reducir emisiones de gas radón son medidas sostenibles que podrán recibir ayudas de hasta 2.000 euros y un porcentaje máximo de subvención del 20%.

Inmuebles catalogados. El área municipal de Urbanismo establecerá ayudas específicas, complementarias del resto, para actuaciones sobre elementos protegidos de los edificios catalogados, tanto del ámbito de protección del casco histórico como en el resto de la ciudad, con cuantías que variarán en función del nivel de protección del inmueble. Así, en consonancia con el cambio en la ordenanza de 2018, si la protección es monumental o integral, el solicitante podrá obtener una ayuda máxima de 5.000 euros; si es estructural, 3.750 euros; y si es ambiental, 2.500. Las obras de conservación en elementos comunes de inmuebles con más de medio siglo de antigüedad en toda la ciudad podrán tener un 20% de subvención y una ayuda de hasta 1.000 euros por vivienda.

Integración de peticiones. Uno de los objetivos de la nueva ordenanza de ayudas a la rehabilitación es vincular los expedientes de concesión de título habilitante urbanístico (licencia o comunicación previa) y los de concesión de subvenciones, de forma que la documentación técnica conste únicamente en el primero de ellos para evitar confusión entre obras autorizadas y subvencionadas. Los plazos de inicio de las obras para las que se piden ayudas también estarán relacionados con los de las licencias cuando se cumplan una serie de condiciones, como la justificación de su necesidad.

Dificultades a evitar. La tramitación de ayudas para la rehabilitación de acuerdo con la ordenanza actual causa complicaciones a los solicitantes, apunta Urbanismo, como por ejemplo documentación de la propiedad desactualizada, testamentos que se deben comprobar, cálculo de las cuotas de propiedad de los inmuebles sin las aportaciones de las comunidades de propietarios o presupuestos de actuaciones objeto de ayuda que superan los 40.000 euros que no se corresponden detalladamente con la misma obra.

Revisión de edificios. La modificación que tramita el Concello se refiere solo a la ordenanza para la concesión de ayudas. Urbanismo esperará también a que la Xunta apruebe y publique el decreto por el que se regule el informe de evaluación de edificios para volver a realizar inspecciones a los que tienen más de 40 años.