La ineficacia de la nueva duna instalada por el Concello en Riazor para evitar la llegada de las olas al paseo marítimo hace que la concejalía de Medio Ambiente estudie otras soluciones para impedir nuevos daños en esta zona. La edil Esther Fontán informó que una de las posibilidades es un arrecife, iniciativa empleada en Japón, ya que no perjudica a la vida marina y es invisible con marea baja. El Gobierno local descarta la instalación de un dique submarino, propuesta que realizó el BNG tras la experiencia realizada en la playa donostiarra de Zurriola, y se ha reunido ya con la Demarcación de Costas para resolver este problema. Fontán aseguró que su departamento también trabaja ya para prevenir los efectos que causará en la ciudad la subida del nivel del mar a causa del cambio climático.