Dos asociaciones vecinales de Palavea y otras de Eirís, Pedralonga, A Zapateira y Castro de Elviña integran una plataforma que reclama información precisa sobre la Ciudad de las TIC. Aprueban la iniciativa tecnológica de la Universidad, pero recelan del proyecto que la implante en los terrenos de la fábrica de armas porque desconocen si los accesos al futuro complejo afectarán a las viviendas del entorno. Tampoco tienen la garantía de que el parque tecnológico vaya a contar con dotaciones propias de un barrio.

¿Cómo y por qué surge su plataforma?

Nos empezamos a reunir en junio del año pasado y nos constituimos en agosto. Todo viene de una reunión previa, en mayo, que tuvo nuestra asociación de Palavea con el rector para tener información de la Ciudad de las TIC.

¿Qué les dijo entonces?

Nos explicó lo que ya se sabía desde la aprobación del proyecto en Madrid a comienzos de año, que no planteaba la integración de los barrios en el proyecto, algo que a nosotros nos parecía adecuado. El rector se mostró abierto a una posible integración.

¿Qué reclamaciones empezaron a hacer?

Nos pusimos en contacto con los partidos para transmitirles que pensamos que el proyecto tiene que tener una dimensión de barrio, repercutir en los barrios del entorno. Desde agosto tuvimos reuniones con la alcaldesa y los demás grupos, y otra con el rector. Pero el asunto estaba judicializado y lo único que vimos fue una infografía con las naves que ya se había mostrado en Madrid, pero sin dotación ni equipamientos propios de barrio.

La fábrica ha quedado libre y hoy se firma la concesión a la UDC. ¿Qué les preocupa?

En octubre nos trasladaron el compromiso de tener una comunicación fluida para conocer la dimensión del proyecto. Pero no conocemos los detalles nada más que por la prensa. ¿Cómo van a afectar los accesos, con posible ampliación de viales, a nuestro territorio? ¿Qué zonas verdes va a haber? ¿Se va a derribar parte del muro? ¿Va a haber aparcamiento público o se va a poder acceder a una biblioteca? Se ha dicho que los vecinos apoyamos el proyecto de las TIC. Eso no es del todo cierto porque no lo conocemos en su conjunto. Aprobamos la idea porque es aprovechable para la ciudad y el sector tecnológico, movida por una institución pública, pero queremos ver el proyecto documentado y con datos, saber cómo va a ser, por dónde irán los accesos...

En Eirís los vecinos están preocupados por las expropiaciones para ampliar el hospital. ¿Temen que ocurra lo mismo por la Ciudad de las TIC?

Sí, porque necesitamos saber cómo se disponen los viales, si pasarán por nuestros terrenos. No nos ha garantizado nadie que no vayan a pasar por ahí, por eso nos sorprende que no haya habido contacto con nosotros. Lo mínimo es informar. No podemos dar apoyo a algo que no conocemos.

¿Creen que la Ciudad de las TIC, cuando empiece a implantarse y se desarrolle, afectará positivamente a sus barrios?

Dependerá de la orientación que tenga. El cómo se haga afectará a los tráficos de los barrios en un sentido u otro. Si se integran las demandas de los barrios y la Ciudad de las TIC tiene significado dentro de cada barrio próximo mejorando sus condiciones y sus interconexiones con el resto de la ciudad, será positivo. Pero eso queremos verlo manifestado por escrito.