La Policía Local ha entrado esta mañana en el asentamiento chabolista de A Pasaxe para derribar algunas de sus infraviviendas. Dos de las familias, según la concejala de Servicios Sociales, Yoya Neira, salen hoy de A Pasaxe para un piso. Ambas con menores a su cargo.
Una pala ha destruido una infravivienda y también una caravana que, según el Gobierno local, estaban deshabitadas desde hace meses, además de las casetas de las familias realojadas. El proceso no fue pacífico. Sobre las diez de la mañana, Policía Local y residentes en la zona se enfrentaron, ya que el propietario de la caseta, que en ese momento no estaba en el poblado, aseguró que nadie le había avisado de que se iba a quedar sin esta vivienda, anexa al lugar en el que almacena y quema chatarra, que es su medio de vida.
Neira ha asegurado que, durante la mañana, se produjo un momento de tensión y que los agentes "repelieron" los ataques, por lo que algunos de los residentes en la zona recibieron golpes en piernas, brazos y espaldas con las porras de los policías desplazados a A Pasaxe. Algunos de ellos acudieron ataviados con material antidisturbios, con cascos y chalecos.
"Vamos a seguir con nuestro plan aunque esto genere controversia. Tenemos un objetivo claro, que es sacarlos de ahí y que accedan a una vivienda digna", ha asegurado Yoya Neira, a preguntas de este diario. No ha puesto fecha, aunque ha asegurado que, habiendo menores en el poblado, la Administración "ya va tarde".
Las máquinas seguían pasadas dos horas en el terreno, con las tareas para evitar que los chabolistas vuelvan a levantar su hogar en el mismo lugar. No retirarán los escombros durante un tiempo, entre ellos amianto, y colocarán unos bloques de hormigón con el logo del Concello para ir parcelando el terreno libre infraviviendas, que es propiedad de la Demarcación de Costas.
