La dirección provincial de la Tesorería General de la Seguridad Social afirma que desconoce el plan del Servizo Galego de Saúde (Sergas) de dejar de prestar atención sanitaria en el hospital Materno Infantil tras el paso de esta actividad al nuevo complejo hospitalario que se construirá en As Xubias de Arriba. Este organismo recuerda que el edificio, construido en 1951, forma parte del patrimonio de la Seguridad Social, por lo que si finalmente es abandonado por la administración autonómica, "se estudiarían las opciones" en relación con el futuro del inmueble.

Este departamento estatal detalla a este periódico que el Materno fue transferido a la Xunta en 1990 al realizarse el traspaso de las funciones y servicios del Instituto Nacional de la Salud. En virtud de esa cesión, la Seguridad Social no puede tomar decisiones sobre el inmueble hasta que la administración gallega "deje de destinarlo al fin para el que fue transferido y adopte el correspondiente acuerdo de retrocesión".

La Seguridad Social manifiesta que ignora si existe voluntad por parte del Sergas de devolverle el hospital, aunque sabe a través de los medios de comunicación que la Xunta pretende llevar la asistencia materno infantil a la ampliación del Hospital Universitario, del que destaca que también es de su propiedad, que se construirá en los próximos años. Pero también recuerda que esa actuación no ha comenzado y que ni el Sergas ni el Gobierno gallego se han puesto en contacto con la dirección provincial coruñesa en relación con el proyecto.

Cuando la Xunta presentó su plan para ampliar el Hospital Universitario, descartó seguir utilizando el Materno Infantil y defendió que sus servicios se trasladaran al nuevo complejo con el fin de unificar la atención sanitaria en la medida de lo posible. El Gobierno gallego consideró también inadecuadas las características del Materno para seguir prestando una labor asistencial, pero no hizo referencia a los problemas estructurales que el arquitecto del área sanitaria coruñesa, José Manuel López Mihura, desveló el pasado miércoles en un debate público sobre el proyecto del nuevo hospital.

Mihura se pronunció a favor de la demolición del inmueble, pero la Seguridad Social será la que tenga la última palabra sobre su futuro. En el caso de que decidiera venderlo y obtener ingresos mediante esta operación, la magnífica ubicación del hospital le convertiría en un gran atractivo en el mercado inmobiliario, aunque para que el inmueble o los terrenos en los que se encuentra pasen a tener otro uso será necesario que el Concello apruebe una modificación del plan general.