Copasa, la empresa que ejecutó las obras de los tres túneles de la Marina, recibe un nuevo revés judicial en las reclamaciones económicas que efectuó a la Autoridad Portuaria, ya que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia desestimó el recurso mediante el que exigía el pago de 1,4 millones por sobrecostes producidos en el túnel de O Parrote.

Este fallo, que puede ser recurrido ante el Supremo, se suma al de hace solo unos días que rechazó el pago de 700.000 euros por esta misma actuación. Otro fue estimado en parte: la constructora pedía 9,15 millones y solo la admitieron el abono de un 20% de esa cantidad. Así, entre los tres pleitos, Copasa demandaba 11,25 millones y obtiene 1,85.

Copasa alegó ante el Tribunal Superior que la negativa del Puerto a pagarle los 1,4 millones que exigía incumple el acta de reconocimiento final de las obras del túnel de O Parrote, mientras que la Autoridad Portuaria argumentó que la constructora ejecutó esos trabajos mediante una concesión administrativa, de forma que debía asumir los riesgos económicos que se pudieran producir durante el desarrollo de la obra, a excepción de que hubiera una causa de fuerza mayor o un incumplimiento por parte de la administración contratante. El Puerto añadió que si la relación con Copasa se basara en un contrato público de obras, tendría que haberse levantado un acta de recepción de las mismas.

Construcciones vinculadas

El Superior destaca en su fallo que la empresa recibió una concesión para construir el túnel que incluía también el aparcamiento subterráneo y su explotación, por lo que estima que "ambas construcciones están necesariamente vinculadas por una misma relación jurídica".

También pone de manifiesto que el director de la obra fue designado por Copasa y que la empresa aceptó de forma explícita las condiciones establecidas en el pliego del convenio mediante el que recibió la concesión. Entre esas condiciones figuraba que la obra se llevaría a cabo "bajo el exclusivo riesgo y responsabilidad del concesionario". El informe encargado por la Autoridad Portuaria a la consultora Typsa sobre los gastos que Copasa incluyó en su reclamación aprecia que la constructora exige el pago de anclajes de muros colocados por cada metro cuadrado cuando en el proyecto se preveía abonarlos de forma global.

También se reclama un mayor pago por arriostramientos que la consultora consideró injustificado, al igual que el abono de los encofrados de aceras, ya que no figuraban en el proyecto. Lo más llamativo es que Copasa exigió el pago de una partida de pintura plástica para los muros del túnel pese a que en la obra, relata el informe, no se pintaron.

Para el Superior, el informe realizado acerca del sobrecoste reclamado por el director de la obra del túnel de O Parrote "es necesariamente insuficiente a los efectos de carga probatoria" porque era un empleado de la empresa y, al mismo tiempo, no se probaron las incidencias que podrían haber provocado cambios en el proyecto inicial de la obra.

El tribunal tampoco considera acreditado que el aumento de los costes se debiera a órdenes de la Autoridad Portuaria "que hubieran motivado un cambio de calidades o modificación del proyecto en su día aceptado".