El presidente de la asociación de vecinos O Castrillón-Urbanización Soto IAR, Ramiro Otero, señala que en la zona "todos esperamos" que la redada antidroga durante la mañana de ayer en el bloque de viviendas cercano a la iglesia de Oza "tenga como resultado final lo que todos esperamos: la erradicación de la venta de droga", si bien añade que "no es fácil" lograrlo. Este punto era "una preocupación para el conjunto de los vecinos", afirma Otero, que añade que "lo hemos denunciado no en una ni dos ocasiones, sino varias veces". En el bloque, situado entre la iglesia de Oza y las calles Camino de la Iglesia y Vicente Aleixandre, se vendían estupefacientes, según explica el líder vecinal, desde hacía unos "seis o siete años", y era el principal punto de tráfico de la zona, pues aunque en algunos otros lugares del barrio "puede haber algún trapicheo", ocurre "con menos fuerza". Además, está cerca el instituto de Monelos y el parque de Oza, donde "aparecían jeringuillas". Otero señala que su asociación estaba en "colaboración continua" con la Policía Nacional, a la que agradece su atención a las denuncias vecinales.