El Concello ha concedido la licencia para la ejecución de obras en el número 6 de la calle Santo Domingo, edificio en el que se deberán demoler las buhardillas para reponer la legalidad urbanística. Fuentes municipales señalan que la licencia de este inmueble situado en la Ciudad Vieja caducó hace dos años, por lo que se incoó un expediente de reposición de legalidad.
La obra está ejecutada al 80% pero, si se quiere completar, la promotora deberá derribar las buhardillas antes de continuar con el resto de trabajos. Así lo exige el Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) redactado en 2015, al que se tiene que adaptar este proyecto.
Esta construcción ya tuvo que superar un obstáculo en 2006, cuando mientras se excavaba el solar se halló un tramo de la muralla medieval de la ciudad. La promotora del número 2 de la calle Santo Domingo, entonces, era la misma que la de los portales 6 y 8 de la calle Príncipe, que están enfrente y donde también se descubrieron restos arqueológicos. Estos dos números pertenecen ahora al fondo Romareda, que compró la deuda de la constructora IDIA a la Sareb „o banco malo„ y adquirió el edificio como garantía. Esta nueva parte fue la que acudió a los tribunales para frenar el derribo total de la obra de la calle Príncipe.
Una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza obligaba a demoler el inmueble, que lleva más de dos décadas en obras, para devolverlo a su estado previo, ya que los vecinos del número 2 de la calle Santo Domingo denunciaron que las actuaciones arquitectónicas les quitaban vistas al puerto coruñés. El enfrentamiento, en el que también está metido la Xunta, está cargado de pleitos e incidencias burocráticas. El derribo, de momento, sigue parado, aunque ahora la responsabilidad afecta también al fondo de inversión.
Lo que sí tendrán que demolerse son las buhardillas del número 6 de Santo Domingo para que, así, su edificación siga adelante y se legalicen las viviendas. A través de vistas aéreas se pueden ver cuatro tejados abuhardillados en este inmueble.
