La Concejalía de Movilidad ha comunicado a las asociaciones de taxistas que operan en el municipio de A Coruña una serie de instrucciones de limpieza y medidas a tomar en sus servicios durante el periodo de alarma por el coronavirus que tienen como finalidad garantizar la salud y la seguridad de los usuarios. Tanto los vehículos como las páginas web informativas deberán mostrar información sobre la situación de emergencia y contener las medidas de prevención dictadas por las autoridades sanitarias.
Los desplazamientos en taxis tendrán que realizarse individualmente mientras dure la alerta sanitaria, salvo que se acompañe a personas con discapacidad, menores, mayores o por otra causa justificada.
Los responsables de los vehículos deberán extremar su limpeza y desinfección, sobre todo de las zonas y elementos más comunes al tacto, como los tiradores de las puertas, cinturones de seguridad y los elementos de apertura y de cierre, mandos de control, reposabrazos y asas. Estas tareas deben realizarse al menos una vez al día con los productos recomendados por las autoridades sanitarias y utilizar para ello los elementos de seguridad que indiquen los productos empleados y eliminar los residuos de la limpieza.
Los taxistas también han de cumplir las reglas básicas de higiene personal determinadas, como el lavado regular de las manos, el uso de toallas de papel de un solo uso, toser en pañuelos de tirar o en el codo y evitar tocar la nariz, los ojos y la boca.
Es conveniente abrir las ventanas de los vehículos de forma periódica y evitar emplear medios de climatización, así como disponer para los usuarios toalliñas o geles desinfectantes de uso personal.
Se recomienda utilizar medios electrónicos para el pago del servicio o a través de aplicaciones móviles, además de limitar al máximo el pago en efectivo para minimizar el contacto entre el condutor y las personas usuarias.
Si los taxistas presentan síntomas compatibles con el coronavirus, como fiebre, tos seca, dolor de garganta y dolor muscular o dificultad respiratoria, deberán seguir las pautas indicadas por las autoridades sanitarias e interrumpir de forma automática la prestación del servicio.
