El albergue organizado en las instalaciones del Frontón Municipal y el Palacio de los Deportes de Riazor para proporcionar comida, aseo y un lugar donde pasar el confinamiento a las personas sin hogar de A Coruña abrió ayer a las 15.00 horas y ya acoge a sus primeros 22 usuarios. Otra persona que mostró síntomas claros de coronavirus quedó a la espera de ser trasladada al hospital, mientras que dos más, con síntomas "sospechosos" , fueron derivadas a otra instalación para permanecer aisladas. El centro tiene ya 35 camas preparadas, y el Ayuntamiento calcula que puede dar cobijo a un máximo de 76 personas.
Los usuarios fueron accediendo uno por uno al centro, en el que un dispositivo con sanitarios y miembros de la Policía Local, Protección Civil y Cruz Roja les iban tomando los datos, clasificando sus pertenencias y realizando un triaje para comprobar si tenían síntomas de coronavirus. La concejalía de Bienestar Social pedía ayer por su cuenta de Twitter que los vecinos les hiciesen llegar termómetros infrarrojos sin contacto.
En el dispositivo también se comprobó el equipaje de los que accedieron, con un detector de metales. Después de pasar el control, los usuarios recibieron ropa limpia y un equipo para asearse y accedieron al centro, al que algunos de ellos pudieron entrar con sus mascotas.
Según señaló la edil de Bienestar Social, Yoya Neira, los gastos del centro serán sufragados por el Ayuntamiento, pero el proyecto cuenta con el apoyo de entidades sociales y de la Consellería de Sanidade, que situará en Riazor un dispositivo con "uno o dos médicos" y un enfermero que vigilarán la salud de las personas sin techo. Según el Gobierno gallego, se controlará su estado de salud "al menos una vez al día", de manera "presencial o tecnológica".
Según fuentes municipales, los usuarios dormirán en el Frontón Municipal, en literas que fueron donadas por la Fuerza Logística Operativa. El centro contará también con espacios de comedor, salas de estar y carpas para prestar servicios en las instalaciones del Palacio de los Deportes, y los residentes podrán salir al aire libre en una zona acotada. Todos los contratos necesarios para el funcionamiento del centro, como el catering o el servicio de lavandería, ya se han contratado, y, según señala el Concello, los usuarios disfrutarán de "asistencia las 24 horas". También habrá un destacamento permanente de Protección Civil y la Policía Local.
Sin embargo, desde el Ayuntamiento insisten en que deberán "mantener distancia", tanto entre las camas, separadas para mayor seguridad, como en las zonas comunes de aseos, recreo y comedor. Así, por ejemplo, la comida se les servirá individualmente. En el caso de que se descubra que alguno de los residentes en el albergue es portador del coronavirus, señalan fuentes del Concello, se les conducirá a otro espacio municipal "habilitado para que estén con gente que se ocupe de ellos".
En el caso de que el albergue de Riazor no fuese suficiente o hubiese necesidad de realojos por la epidemia, el Concello sopesa abrir más espacios en instalaciones municipales.
