Para unirse al aplauso con el que los vecinos dan las gracias al personal sanitario y al que combate el coronavirus en primera línea, los buses urbanos hicieron brillar sus intermitentes a las ocho de la tarde. Los trabajadores recordaron en redes sociales esa frase de que todos llevamos un héroe dentro, aunque ellos los pueden llevar a todos, aunque solo sea de casa al trabajo y del trabajo a casa.