El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha advertido "numerosos incumplimientos" del documento de bases de acuerdo para el desarrollo de la estación intermodal de A Coruña, firmado en noviembre de 2017, en el proyecto básico de la terminal de autobuses, actuación que compete a la Xunta. Esta circunstancia supone "incompatibilidades" con el proyecto de remodelación de la estación ferroviaria de San Cristóbal, aprobado por Adif en junio del año pasado, que, según apunta el órgano estatal en un comunicado, han de resolverse antes de la aprobación del proyecto de construcción de la estación de buses, que en la actualidad se encuentra en fase de exposición pública.

La comunicación de Adif se produce un día después de que, a través de sus representantes técnicos, informase a la Xunta y al Ayuntamiento de que el proyecto de la terminal del tren, cuya licitación se anunció hace casi un año, va a tener que ser actualizado para adecuarse al nuevo Código Técnico de Edificación (CTE), recogido en un real decreto del pasado 20 de diciembre. Esta adaptación retrasará hasta comienzos de 2021, según cálculos de la Xunta, la licitación prevista para este año tras no haberse realizado en el anterior.

Adif atribuye el nuevo retraso en el desarrollo de una infraestructura concebida hace más de una década y cuyo diseño ha sufrido varias modificaciones a una actualización técnica que requiere de la aplicación de medidas que han de garantizar la salubridad del edificio ferroviario y protegerlo frente al gas radón, como explica en la nota. "La adaptación cumplirá con la normativa y será especialmente sensible con la sostenibilidad, eficiencia y cuidado del medio ambiente", expone Adif.

El administrador ferroviario añade en el comunicado que su proyecto en la intermodal, estimado en 48,5 millones de euros y con 28 meses de trabajos, será "compatible" con los que les corresponde desarrollar a la Xunta y al Concello. Pero aprovecha para señalar las incompatibilidades entre el plan de la estación de buses y el de la remodelación de la estación del ferrocarril, situación que "en ningún caso", a entender de fuentes de la Consellería de Infraestructuras, sirve para explicar el nuevo retraso que sufrirán las obras de Adif en la intermodal coruñesa.

El comunicado estatal concreta que los incumplimientos motivados por el proyecto de la Xunta hacen necesario modificar aspectos relevantes del plan de remodelación ferroviaria ya aprobado por Adif que están relacionados con "cimentaciones, estructuras, redes de saneamiento, condiciones de evacuación de incendios, plazas de aparcamiento y procedimientos constructivos propuestos". "Esta eventualidad debería ser aprovechada para adaptar el proyecto de estación de autobuses al proyecto de remodelación de la estación ferroviaria de Adif, dando cumplimiento a los acuerdos de desarrollo técnico pactados previamente", añade el órgano estatal.

El concejal de Infraestructuras y Movilidad, Juan Díaz Villoslada, admite que el trabajo conjunto entre las tres administraciones para desarrollar sus competencias en el proyecto de la intermodal ya apuntaba algunas incompatibilidades técnicas debido a la complejidad de los trabajos, aunque se muestra sorprendido por que haya que actualizar el proyecto de Adif con la justificación de adoptarlo a una normativa técnica de finales del año pasado que vuelve a retrasar su licitación.

Antes de la aprobación de ese nuevo Código Técnico de Edificación Adif se amparaba en otra explicación para que aún no hubiese salido el proyecto a concurso, pese a haberlo anunciado el delegado del Gobierno en Galicia en junio de 2019: la falta de aprobación del mismo por parte del Consejo de Ministros, al encontrarse en funciones por la tardanza en constituirse el Gobierno central tras las elecciones generales. Ese argumento desaparece ahora en favor de una justificación técnica, un cambio de discurso que ha molestado tanto al Concello como a la Xunta.

La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, manifestó ayer que "A Coruña merece una explicación" y lamentó que el Estado tenga "paralizadas sine die" inversiones en la ciudad y la comarca, entre las que mencionó la intermodal, la remodelación de la avenida Alfonso Molina, el vial 18 y la conexión ferroviaria a punta Langosteira. Vázquez pide al Estado que "se comprometa a trabajar por la competitividad y recuperación" de la ciudad y su área metropolitana.

La alcaldesa, Inés Rey, solicitó al ministro de Transportes, José Luis Ábalos, una reunión para tratar las inversiones del Estado en la ciudad desde que este tomó posesión de su cargo, pero el encuentro aún no se ha producido.

Aún sin convenio

Adif, Xunta y Concello abordaron también este martes en una videoconferencia aspectos relacionados con el convenio a tres bandas para materializar cómo ha de ser el desarrollo y ejecución de la estación intermodal, y que las administraciones autonómica y local le han reiterado que agilice. El documento sigue sin plasmarse, si bien el ente ferroviario aseguraba a finales de enero que las nuevas peticiones urbanísticas que le había trasladado al Concello en su tramitación del cambio en el planeamiento no iban a retrasar ni la licitación de las obras ni un convenio que en aquel momento se estaba "ultimando".

La Xunta, por su parte, mantiene el objetivo de licitar antes de que acabe 2020 las obras de la nueva estación de autobuses por 17,4 millones. Infraestruturas ultima el proyecto constructivo y ha iniciado su tramitación urbanística amparándose en la ley gallega de medidas en materia de proyectos públicos de excepcional interés. El mes pasado el departamento gallego acordó con el Ayuntamiento unos ajustes porque el proyecto de la Xunta, a exposición desde marzo, presentaba una superficie que excedía el espacio que reservaba a la obra la modificación urbanística iniciada en diciembre por el Concello.

La administración local se encargará de los accesos mediante dos cambios en el planeamiento urbanístico, cuya tramitación inició a finales del año pasado. Además financiará el aparcamiento de la estación de autobuses a cambio de gestionarlo durante 20 años y realizará actuaciones que mejoren la calidad urbana de la plaza de San Cristóbal y las avenidas de A Sardiñeira y O Ferrocarril.